34. Solo me gustas tu.

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Jungkook sentía que se calentaba infinitamente, joder, Jimin era ardiente, lamió sus labios una y otra vez, su lengua rozó sus labios y los dos abrieron los ojos ante el chispazo de placer que los atravesó, sus lenguas se habian tocado. Jimin jadeo y regresó a su lugar terminando el beso más caliente en la historia de la humanidad.

- Listo, oficialmente somos amigos con derechos - Jimin sujetaba su pelo hacia atrás y respiraba trabajosamente, sonrió y lo volteó a ver mordiendo su propio labio.
- ¿Cómo lo hice?

Jungkook estaba en shock, Jimin lo había besado, por fin después de tanto tiempo volvía a tener ese privilegio.

- Joder Jimin - Jungkook necesitaba más de él así que lo volvió a atraer a sus labios, lo había necesitado por tanto tiempo. Sus labios fueron receptivos una vez más y gimió ante la intromisión de su lengua, lamió sus labios una vez más jalándolos alternadamente. A Jimin le gustaba morderlo pues sintió que lo hacía de nuevo, el beso subió de temperatura ahogando un gemido de él en su boca.

Jimin terminó de nuevo el beso.

- No respiro - cerró los ojos - Solo te daré un beso en la mañana y uno en la tarde, no más, ¿Escuchaste?

Jungkook sonrió de lado y se recargó en su lugar hacia atrás. El era absolutamente encantador y ahora podía disfrutar de sus besos. Tae tenía razón, Jimin de nuevo había creado un cariño hacia él. Su corazón se sentía morir de amor.

- Como tu digas.

El lo miraba un poco inseguro, Jungkook volteó hacia la ventana tratando de contener sus ganas de besarlo de nuevo, él no lo sabía, pero lo que el creía era un juego tonto se había convertido en su nueva razón para vivir.

- Uff bien, hoy ya agotaste tus dos - el joven suspiraba. Pero Jungkook cerró los ojos, había aclarado la mente, él lo miraba curioso.

- Aceptaré todo lo que tu me puedas dar - sus ojos brillaron y Jungkook sonrió al verlos tan lindos - por poco que parezca... para mí significa mucho.

Jungkook tomó su mano lentamente y la acercó a sus labios, la besó suavemente y luego la envolvió con sus manos.

Él lo miro con brillo y sonreía honestamente.

.

Jimin no podía más con las emociones que lo estaban embargando ¿Podía ser más lindo? Había aceptado ser su amigo con derecho pero esperaba que él le pidiera ser su novio pronto, moría por acercarse a él y besarlo más veces.

Tranquilizate Jimin es el primer día.

Dejó que él aprisionara su mano, cerró los ojos disfrutando de la calidez de su tacto, el beso lo había dejado tan emocionado que lo único que quería era perderse en las sensaciones que él despertaba en su cuerpo.

- Seré todo lo que quieras que sea - Escuchó su hermosa voz y abrió los ojos perdiéndose de nuevo en su brillosa mirada, era tan diferente del día sábado, ahora se veía más tranquilo y lo miraba más profundamente, le dedicó una sonrisa coqueta.

Demonios que no quería ser cursi, pero en verdad tenía ganas de solo verlo todo el día  y sonreírle como un tonto.

- ¿Qué pasa Jimin? Pareces preocupado.

-  Solo que esto es demasiado cursi.

Jungkook se rió y Jimin quiso pellizcarlo para que no se riera de el, pero terminó riéndose el también.

Recompuesto lo observó de nuevo, a el también le encantaba todo aquello, lo podía ver en su mirada.

- Bien ahora ¿Cómo se supone que iremos a la entrada sin mojarnos? - Pero antes de pensarlo más, salió corriendo en la lluvia tapándose con el abrigo, estaba muy nervioso y feliz que Jungkook hubiese aceptado, volteó y vió que corría detrás de el sonriendo.

I miss you Donde viven las historias. Descúbrelo ahora