Secrets of love: Aron [3]

Años atrás...

- ¿Y bien? ¿Esta vez me dirás que hacías mirándome o no?- lo mire a los ojos pero solo sirvió para recibir otro golpe de su parte.

- Axel para ya...- le dije con dificultad- por favor.

- Esto te lo buscas tú por meterte en lo que no te importa, no te sirve de nada ser un Rivers, si nisiquiera pareces uno- me levanté como pude por el dolor en mi abdomen.

- ¡En tu vida me vuelvas a decir que no soy un Rivers!- De un empujón lo tire al suelo.

- ¿Que vas hacer? ¿Le dirás a tus hermanos que te defiendan? Oh es verdad... casi lo olvido, uno de ellos cayó en depresión por una chica, que débil- Ander, habla de Ander, se levanto y me cogió el cuello de la camisa- Mi tío es mucho más poderoso que tú insignificante familia.

- Alexander no le llega ni a los talones a los Rivers- me soltó y caí al suelo.

- ¿Como sabes el nombre de mi tío?

- Es fácil, somos dueños de todo el estado, sabemos quienes son nuestro enemigos, quienes nos traicionan y quienes son nuestros amigos... ¡tu tío no es nada de eso, es solo un idiota que se cree mafioso pero no es capaz de nada!

- ¿Ah no? ¿Y qué me dices de Aryan?

- ¿Que con el?

- Si mal no recuerdo... tu madre dice que el no es un Rivers, que es insignificante en esa familia y que nisiquiera debió haber nacido- Hasta aquí llego mi paciencia, odio que se metan con mis hermanos, hace unos días le quité el arma a mi padre por que según yo quería ser popular, que idiota... la saque de mi cintura, lo apunto- Aron...

- Callate, no me importa lo que me digas o hagas a mi... pero con mis hermanos no te metas- Trago saliva.

- Solo dije la verdad- Sin pensarlo dos veces, cerré los ojos y disparé...

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Cuando volví a casa, no sentía nada, ni miedo, ni remordimiento, ni tristeza... absolutamente nada.

- Aron ¿por que tardaste tanto?- pregunto Aryan, lo mire y sonreí- ¿por que estas golpeado?

- Tuve un pequeño problema... pero nada que un Rivers no pueda solucionar.

- ¿De qué hablas?- se acerco a mi.

- De que soy un Rivers.

- Si pero... no entiendo.

- Olvidalo Aryan, solo... olvidalo- me miro confuso y yo subí a mi habitación.

El que se mete con mis hermanos, se mete conmigo... y yo no tengo piedad ni un poquito.

Dirán que soy un niño inocente de catorce años, pero no me conocen... ni un poquito.