I miss you

21. La más hermosa melodía.

Tae de nuevo se dejó guiar por la mano del mayor, el sacó una silla y lo invitó a sentarse. Tae lmiraba el paisaje anonadado, jamás había estado en un lugar tan hermoso, miró la silla y salió de su ensimismamiento, tomó asiento y cuando ya estuvo sentado lo miró preguntándose quien demonios era ese hombre y por que parecía estar completamente en su zona de confort mientras que Tae se debatía si en realidad se merecía estar sentado allí.

- Tae, si me miras también de esa manera no podré resistirme.

El menor bajó la mirada apenado, debía tomar otra vez su papel, suspiró y trato de ponerse serio pero de nuevo, su corazón fue acelerado por el sonido de un violín que sonó desde dentro de la estancia, el buscó el sonido asombrado.

- La abadía de Nothinger - murmuró

- ¿Sabes cuál es esa canción? - Tae vio que Yoongi estaba sentado a un lado de él asombrado por su oído pródigo.

- Si, esa canción es una de mis favoritas.

- Yo nunca la había escuchado o no le he puesto atención.. creo.

- Es una de las canciones básicas para aprender a tocar el violín.

- Tae ¿Eres músico? - Tae sintió algo cálido en su pecho al escucharlo decir que era músico, dentro de sus más grandes anhelos era llegar a ser uno, pero por el momento veía ese sueño demasiado lejos aún.

- Aún no - Sonrió modestamente - pero mi padre siempre me ha dicho que aprender a tocar un instrumento es básico para llegar a ser artista. Yo estoy aprendiendo a tocar el violín.

- Moriría por escucharte tocar.

Tae estaba sorprendido de lo fácil que era platicar con el mayor, aunque sabía que tenía talento para el violín, aún no estaba preparado para enseñar su aprendizaje, de repente en su mente una imagen de ellos dos en una escena doméstica donde Yoongi y él estuvieran sentados en su cama sonriendo mientras que Tae tocaba esa misma melodía, cerró los ojos y disfrutó de su imaginación, sin pensar comenzó a menear la cabeza y sus dedos al ritmo de la melodía. Se dejó llevar hasta que la melodía terminó.

Cuando abrió los ojos su acompañante lo observaba de una manera que no pudo descifrar, sus miradas se conectaron. A Tae se le olvidó la desconfianza y el enojo, solo se miraron sin saber a ciencia cierta que era lo que estaba sucediendo entre ellos.

Unos segundos eternos después la puerta sonó anunciando que alguien llegaba, rompiendo el hechizo en el que se encontraban ambos, otra hermosa melodía se escuchaba en el fondo y un viento frío se sintió en el ambiente, Tae miro inseguro a Yoongi pero este había bajado la mirada haciendo como que acomodaba su silla incómodo.

- Aquí está el menú- El mesero se acercó con cartas en la mano.

Tae rápidamente la agarró y se escondió detrás de él, sus mejillas se sentían calientes y estaba seguro que ya no podría hacer el papel de enojado con él, en su mente aparecieron las imágenes de ellos besándose en su sueño.