Efímero

Capítulo 6. Escarabajo

---------------------------------------------------------CAPITULO 6-------------------------------------------------------

Mi cabeza explotaría en cualquier momento por la combinación de la luz y la alarma de Jenn, definitivamente no fue la mejor opción tomar un Don Julio*, seguido de un 1800* y ahora como consecuencia iría a trabajar con la peor resaca de la vida, debería ser ilegal trabajar de esta manera, de hecho, lo es...

Después de unos cuantos gritos hacia Jenn y varios intentos de encontrar su celular, nos pusimos de pie para cambiarnos, desayunar e ir al trabajo.

Supongo que lo peor de tener resaca es trabajar en una tienda de música, donde se conceden pruebas y (obviamente) hay música por todo el lugar.

Y así pasó la semana de aburrida, lo más interesante de la semana fue escuchar a Theodor burlarse de la reacción de Robín al fumar marihuana por primera vez y el regreso de la banda del otro día, intentaron coquetearle a Jenn de nuevo, pero Robín intervino y ahora todos sabemos que están en una relación oficialmente.

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Creo que lo peor de tener una ¿ex? Definitivamente es la manera loca de seguirme que esta adquiere, no es la primera vez que vienen a mi casa a llorarle a mi hermana que las deje pasar pero que Alicia lo haga sabiendo que lo nuestro no era nada serio, aunque tuviéramos años de tenerlo, no me iba a dar cuenta que al final de todo este tiempo yo estaba perdidamente enamorado de ella, eso no era el caso, eso solo pasa en los libros que lee Melanie. Por otro lado, preparar todo para el fin de semana me estaba consumiendo, pero no tanto como los recuerdo del viernes, el verla ahí bailando con el idiota que la engaño no me hacía muy feliz, no la acosaba, solo sabía de su existencia y se me hacía linda, eso era todo, tampoco soy un depravado.

- Hola escarabajo, ¿Cómo va todo en tu pequeño negocio de drogadicción? – Y ahí vamos... Melanie mi hermana menor.

- Hola bestia, no tengo un negocio de drogas y ya deberías de saberlo tú más que nadie, y será mejor que te des prisa, necesito que resolver unos asuntos después de llevarte al colegio – Melanie era mi hermana menor, con 16 años y la perdida de mí padre no pude haber deseado que sea de otra manera, cuando él murió hace 3 años, quede con la custodia completa de mi hermana que justo ahora se encontraba preparándose un cereal.

Melanie se sentó justo frente a mí y comenzó a platicarme sobre sus amigos y sus planes de la semana, ya que no me encontraba aquí tan a menudo ella intentaba planear su semana y contármela y la señorita Clara, nuestra ama de llaves se encargaba de cuidarla lo más posible mientras yo no estaba.

- ¿Y entonces que dices? ¿puedo ir contigo el siguiente fin de semana a la presentación de tus amigos? No estaré junto a ti, llevaré a mis amigos. – y aquí vamos de nuevo.

- Melanie tienes 16 años y dudo mucho que los mocosos de tus amigos tengan una credencial para entrar a un bar donde se necesita una edad mínima de 18 años para entrar y en dado caso que se quieran pasar de listos mostrando una identificación falsa, recuerda que conozco a sus madres. – Creo que no le causará mucha gracia lo que le dije, cuando se enoja la frente se le arruga como a nuestra madre.

- No puedes hacer eso Oliver – chilló la infanta

- Claro que puedo, soy tu hermano mayor y el que está a cargo de ti, y no dejaré que a tus 16 años entres a un bar donde pueden sucederte miles de cosas, Mel, entiende, intento hacer lo mejor para ti, así como ellos hubieran querido, solo intento protegerte... - Pude ver como sus ojos se cristalizaban frente a mí, odiaba que hablara de él, y lo entiendo, también era mí padre, a su muerte lo único que me impulso a seguir era ella, el favor que le debía a él. tras aguantar todas mis estupideces, era cuidarla a ella. – Vamos Mel, es hora de la escuela.

***

Después de dejar a Melanie en la escuela y resolver unos asuntos para la presentación de mañana solo restaba encontrarme con la banda para unos cuantos arreglos de último momento.

Llegando saludé a la banda, desde Kalus hasta Lenin.

- ¿Y cómo van las cosas? ¿Ocupan algo más? – pregunté, era la primera vez que se presentarían aquí, de hecho, era la primera vez que se presentarían en general, Kalus era mi mejor amigo desde jardín de niños y cuando decidió formar una banda tenía que apoyarlo.

- Estamos bien Aceituna, la cuestión aquí, es ¿tú estás bien? -

Observé a Kalus con la mirada más fulminante que pude darle y después me eché a reír.

- ¡Claro que estoy bien! ¿piensan practicar antes de esto? –

- Pues sí, si el rey del lugar nos presta su escenario lo menos que podemos hacer es darle una de nuestras mejores presentaciones. – aclaró Clayde.