Después de vencer a Thanos las cosas fueron cayendo en su lugar paulatinamente hasta que el orden finalmente se restableció.
Tony podía descansar tranquilamente junto a su familia sin la necesidad de sentir que el mundo colapsaría a cada segundo cada vez que cerrara los ojos. Además, Peter estaba devuelta y eso lo había vuelto bastante feliz.
***
8 años más tarde
El cabello de Tony se había blanqueado, su hija Morgan era toda una señorita de 13 años bastante hermosa que atraía miradas donde estuviera. Tony jamás se había preocupado pues sabía que su pequeña era inteligente y sabría defenderse sola cuando la situación lo requiriera. Además, la "Tía" Natasha y sus entrenamientos de defensa personal tenían sus ventajas.
—Amor, Peter y Harley dijeron que vendrían por la tarde, quieres que pida algo para la cena, o...
—¡¿Peter vendrá?!
Tony alzó una ceja en dirección a si hija y la miró con seriedad.
—¿Disculpa?
Morgan sonrió con nerviosismo, terminó de bajar las escaleras y se acercó lentamente hacia su madre.
—Es que hace mucho no viene—dijo Morgan de manera tímida, oculta tras Pepper—. Harley es el que más se pasa por aquí.
Tony la miró con sospecha durante unos segundos antes de dejarlo pasar.
—Bien—musitó, no sin antes dar una mirada de advertencia a su hija, y concentrar su atención en su mujer—. Y sí, cariño. Gracias. Posiblemente pasemos un tiempo en el taller.
Pepper asintió. Se giró a su hija y le dejó un beso en su frente antes de alejarse.
***
Era la hora de la cena, y por alguna extraña razón, Tony no dejaba de mirar a Peter. El joven arácnido estaba completamente incómodo, pero aún así no dejó de prestar atención a todo el parloteo de Morgan. Hacía algo de tiempo que no se miraban, así que no se podía perder ninguna de sus palabras. debían ponerse al día.
Harley también comentaba de vez en cuando, entre pláticas la cena transcurrió, pero el silencio de Tony seguía siendo algo inusual.
***
Pepper estaba recostada sobre el respaldo de su cama, con un libro en sus manos y unos pequeños lentes de lectura. Tony iba saliendo del baño, con una toalla alrededor de su cuello y sin más se dirigió a sentarse a lado de su esposa.
—¿Qué ocurre, cielo?—preguntó Pepper sin despagar la mirada de su libro—Has estado muy pensativo desde que los chicos llegaron.
—¿Crees que soy demasiado paranoico?
Pepper giró su rostro con una suave sonrisa, para ver fijamente al mayor.
—Siempre lo has sido, Tony—comentó con diversión—. ¿Cuál es el problema ahora?
Tony se quedó pensativo durante algunos segundos. Mordió ligeramente su labio inferior. Había un claro debate interno revolviendo su cabeza. Pepper comenzó a preocuparse.
—No es nada—respondió el genio finalmente, dejando a su mujer con una mueca inconforme.
***
Oh, pero claro que si era algo. ¿Cómo carajos había pasado eso?
Tony sintió un hueco en su estómago cuando vio a Peter y Morgan sentados en el suelo junto a la mesita de centro, compartiendo fórmulas y demás cosas de genios. Tal parecía que se trataba de algún trabajo de Morgan. ¿Por qué su niña ya no le preguntaba sus dudas a él? Bueno, quizás no era nada. Quizás solo quería aprovechar que Peter estaba ahí. Pero... Harley también era un genio... ¿Por qué no le preguntaba a él?
