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-Jungkook.

-....

-¡Jungkook!

- ¿Mh? -- el castaño despegó un poco la cara de la almohada, para abrir levemente  sus ojos, encontrándose con el rostro de Yoongi. Era algo raro ya no ver como saltaban sus encías cuando sonreía mientras movía su cuerpo con mucha energía.

- Tengo hambre.

-¿Quieres sangre?

- ¿Mh?

-Oh, lo siento. Es la costumbre. -- Jungkook dió un brinco y por sorpresa tomó al más bajo entre sus brazos hasta volver hacerlos caer a la cama. Yoongi intentaba forcejear entre aquellos fornidos brazos que los sostenían, sintiendo su tripa chillar -- ¿No quieres comerme a mí?

- ¡No! Tengo hambre, Jungkook, si no me traes comida en estos momentos, me voy a ir ahora mismo a pedir a la calle. -- dijo firme y fuerte, logrando sacar un gruñido de los labios de Jungkook quien aún luchaba por mantener abierto sus ojos.

El castaño dio un beso en el cuello del pálido para levantarse, mientras quitaba las sabanas de su cuerpo y Yoongi las tomaba para cubrirse un poco.

-Está bien, está bien, ya voy. -- Yoongi sonrió con emoción mientras tomaba las sabanas de la cama, cubriéndose con ella y se movía al armario yendo a buscar ropa.

Jungkook salió del baño para que Yoongi ingresara y lo dejó ahí para dirigirse hacia la cocina, notando como el palido ingresaba segundos después.

-¿Pero qué mierda ha pasado? -- Jungkook estaba un poco ido viendo que la puerta de la alacena estaba arañada y restos de la comida de gato estaba regada en el pasamanos y el suelo de la cocina.

-Seguro fue tu gato. -- Jungkook frunció el ceño, recordando a su felino animal que solo creaba desastres y pensando que seguramente ella había sido. Pero ella nunca había atacado así su comida, siempre era muy cuidadosa.

Suspiró empezando a recoger y limpiar. Poniendo agua a calentar y sacar algunas cosas del refrigerador. Quería hacerle algo rico a Yoongi, después de todo habían pasado cierto tiempo sin comer y sólo habían tenido sexo, mucho sexo; era obvio que necesitaba comer y se sintió un poco mal por ser tan descuidado.

-¡Jungkook! Ven. -- el grito del más bajo fue de total emoción y asombro. Haciendo que el menor le bajara el fuego a la estufa y se pusiera en alerta para caminar en dirección hacia él. Tratando de dar con el pálido, se adentró por el cuarto de huéspedes donde tenía las cosas que no utilizaba, en fin el cuarto era un total desastre, pero el punto es que Yoongi estaba arrodillado en medio de unos cartones llenos de polvo y viendo a algo que parecía ser una bola de pelos grande. Era Michi con...

-¡Son gatitos!-- ¿Su gata estaba cargada? Eso explicaba porqué había hecho su desastre en la cocina. Yoongi empezó a hurgar con cuidado hasta poner los gatitos cerca del vientre de la madre y sonreír enternacidamente. -- Son tres ¡Mira! Este se parece a ella.

-Mierda, Michi, ¿Desde cuando pasó esto? ¿Cómo es que no me di cuenta?

- Estabas muy distraído follando conmigo, por eso. -- Yoongi lanzó una risita por lo bajo.

- No lo digas, o me voy a excitar y después no respondo-- respondió el castaño con una ceja enarcada y una sonrisa cínica.

- Cállate, que ni siquiera te preocupas porque coma, es...

- ¡Joder, la comida! -- Jungkook se levantó de un tirón, casi corriendo a la cocina y se dió una pequeña palmada en la frente notando como todo se había quemado y su plan se había ido por la borda.

- ¿Qué pasó? -- el más bajo apareció por la cocina, notando como Jungkook tenía pegados los codos al pasamanos mientras sostenía su cabeza con sus manos, cerrando sus ojos. Jungkook levantó el rostro para ver que Yoongi sostenía los gatitos en sus brazos mientras Michi estiraba el cuerpo junto  a ellos.

-La comida, se quemó. -- entregó sus párpados con las yemas de sus dedos. -- Ve a cambiarte, saldremos a comer algo.-- Jungkook empezó a recoger los sartenes y las ollas para ponerlos en el fregadero mientras veía a Yoongi asentir e ir en dirección a la habitación.

El castaño estaba por entrar a la habitación cuando notó a Yoongi solo en ropa interior y se posicionó tras el estregando su miembro en las nalgas del más bajo. Yoongi frunció el ceño.

-Jung...Jungkook ¿Qué haces?

-¿En serio tienes hambre? Por que podríamos desayunar en la cama.

- ¡Déjate de mierdas! Estoy que me muero de hambre, no me jodas.-- Jungkook movió sus pies empujando el cuerpo de Yoongi hasta hacerlo topar en el armario, mientras que con una mano le tocaba el pezon izquierdo y con la otra le tocaba el miembro, empezando a besar su cuello, escuchando los jadeos que se escapaban de la boca del otro.

- Po..por favor ¡No hagas esto!

-Amor, solo déjame contemplarte, bebé  cinco minutos no van hacer que te mueras de hambre.-- fué bajando la mano que tenía en su pecho para ir toqueteando por la cintura hasta meter la mano por la cunturilla de sus pantalones e ingresar rápidamente y sostener una de sus nalgas haciendo que el más bajo soltara un gemido al momento que acarició su entrada con uno de sus dedos. Luego se sostenía del armario con la cara pegada y la frente sudada mientras mordía su labio inferior.

Jungkook mantenía su respiración agitada mientras sentía su miembro apretar sus pantalones e ignoraba el llamado de Michi por la puerta de la habitación.

Estaba por ingresar su dedo al culo de Yoongi cuando cuando escuchó que la puerta principal fue abierta y sacó inmediatamente su mano, soltando a Yoongi, poniéndose alerta salió de la habitación, con un Yoongi asustado tras él.

Se encontró con la única persona que tenía las llaves de su apartamento aparte del dueño del hotel frente a la puerta.

-¿Sehun?





















Bébeme • [Kookgi]Where stories live. Discover now