La verdad no contada |KookV| [Omegaverse]

6

—Papá es malo, ya no te quiere.

Al escuchar las palabras de su cachorro mientras sollozaba, hizo que su corazón se quebrara en gran manera, su hijo estaba sufriendo por su culpa, por esa falta que cometió.

Ver sufrir a su pequeño era el dolor más grande, él podía soportar todo, menos ver a su hijo sufrir por su culpa.

Lo estrechó más consigo, soltando él sollozos también, ver llorar a su pequeño era horrible.

—No digas eso, cariño. 

—P-Pero es la verdad —Decía mientras sorbía por la nariz—, sino él, no me hubiera presentado a..., papá es malo ¡no te quiere!

El castaño a duras penas entendió lo que su cachorro quiso decir, pero fue suficiente para que sacara conclusiones y eso, eso era muy doloroso.

—Bebé... —Canturreó mientras se sentaba en el sillón y lo acomodaba en su regazo, para luego levantar su cabeza haciéndolo que lo mire—, pensé que ya había quedado claro... —Se mordió el labio inferior, para luego pasar su lengua sobre éste, le costaba decir en voz alta lo que diría—, tu papá..., es verdad, ya no me quiere como pareja, cariño; pero no es motivo para que te sientas triste, él igual te ama, además, yo soy el culpable que no me quiera. No lo culpes, él no es malo, te ama, cariño. No te enojes con él, hazlo conmigo, soy el culpable después de todo.

Su pequeño lo miraba con tristeza y sus lágrimas no dejaban de salir, provocando que su corazón se desgarrara. Limpió sus lágrimas y lo volvió a abrazar buscando él también confort en su hijo.

—T-Tienes que aceptar que tu papá y yo..., ya no estamos juntos, bebé. —Dolía, dolía como no tienen idea—. Así que..., no te vayas a portar mal con la pareja de tu papá ¿sí? —Ahora él era el que sorbía por la nariz.

Su pequeño sólo asintió mientras se separaba, para ahora él limpiarle las lágrimas. Sus manitas temblaban mientras limpiaba los rastros de lágrimas. Como pudo le sonrió a su papi.

—No llores, papi. No estés triste. —Le decía mientras seguía limpiando las lágrimas que salían solas—. Yo seré tu alfa y cuidaré de ti ¿sí? —TaeHyung sentía que se desmoronaba, su hijo era un bello ser. Como pudo le asintió—. Tú..., aún lo quieres ¿verdad? —Volvió a asentir—. Entonces... ¿por qué papá no? 

Cómo explicarle a un pequeño de cuatro años que los adultos cambian de decisiones. Cómo explicarle que su papá ya no lo quiere, porque él le falló. Cómo explicarle que..., aunque él aún lo quiera, eso no cambiará nada. ¿Cómo?

—Cariño... ya te expliqué que..., —Suspiró para luego agarrar las manos de su pequeño y besarlas—, son cosas de adultos que aún no puedes saber, sólo debes de entender que tu papá no es malo, sólo ya no podemos estar juntos.

—¿Aunque eso te lastime?

—Aunque eso me lastime. —Le aseguró.

—Entonces..., no quiero ser adulto, sólo quiero crecer y ser un alfa para cuidar a ti y a Minnie.

Le sonrió, sin duda los niños son tan inocentes. Besó la frente de su pequeño y volvió a estrecharlo en un abrazo.

—Entonces sé un alfa fuerte para que cuides de ambos. 

—¡Lo seré! —Dijo animado y empezó a esparcir besos por todo el rostro de su omega padre, haciéndolo reír por tan bello acto, todo hasta que un pequeñín empezara a llorar—. ¡Minnie también quiere mis besos! —Exclamó, para bajar del regazo de su padre e ir al corral de su hermanito.

Sin duda, eso era lo que lo llenaba de vida, ver a sus pequeños feliz.

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