| 16 |

2.8K 449 112
                                    

Tuvieron que pasar días para que BangChan estuviera completamente recuperado, con ayuda del pequeño ChangBin logró encontrar otro lugar para cantar.

Esta vez estaría en el escenario de un pequeño bar cercano al departamento del menor, eso sólo hizo que el dúo pudiera verse más pues el horario nocturno le permitía al de cabellos grises juntarse con él.

–Estoy agotado.–El australiano se sentó en la barra, el lugar ya se encontraba vacío y sólo estaban sus compañeros limpiando.

–Hoy fue una dura noche.–El encargado de las bebidas dejó un vaso frente a él, a pesar de que el menor llevase poco tiempo trabajando ahí él y el pelirrojo lograron amigarse con rapidez.

Y claro que Chan logró hacer amistad no solo con él, todos los trabajadores de ahí amaron al australiano desde el primer día

–Gracias.–Chan bebió con lentitud el contenido del vaso.

–¿No vendrá a buscarte hoy el pequeño?.–El pelirrojo estaba centrado en su trabajo limpiando los vasos.

–Le pedí que no, ha estado llegando tarde a la universidad por mi culpa así que me iré solo a casa.–No tardó en acabarse el vaso para luego levantarse y estirarse.

–¿Pasas por el centro?.–Cuestionó Daniel una vez terminó con sus deberes, vió como el menor asintió y volvió a hablar.–Puedo acompañarte hoy si quieres, tengo que ir a por un pedido allá.

–¿De verdad?.–El de cabellos grisáceos le sonrió animado.–Me parece perfecto.

El dúo tomó sus cosas, se despidieron del resto y emprendieron camino al centro de la ciudad.

Al estar ahí BangChan se ofreció a acompañarlo y terminaron en la cafetería donde trabajaban las amigas del australiano.

–¡Hola!.–El más bajo saludó animado al entrar mientras que el pelirrojo a su lado observaba el lugar.

–Chris.–Una chica de cabello corto, ahora negro, se acercó a saludarle.

–Chae.–Le sonrió recibiéndola con un abrazo.–Vine con un amigo del trabajo.–Dirigió la vista de la chica hacia el pelirrojo.

–Un gusto.–El pelirrojo sonrió y cuando iba a presentarse el menor lo hizo por él.

–Es Daniel, Kang Daniel, el barman de donde trabajo.–Comentó Chan mientras iban hacia una mesa, al sentarse dirigió su mirada de nuevo al pelirrojo.–Ella es Chaeyoung, mi amiga.

–Un gusto Daniel.–Con delicadeza la chica les entregó dos menús y esperó ahí a que el dúo pidiera algo, en cuanto obtuvo los pedidos se alejó yendo hacia la cocina.

–Eres muy sociable ¿no?.–Cuestionó Daniel mirando al chico frente a si.

–Oh, no tanto.–Una risa nerviosa se le escapó.

Dado que el australiano se notaba agotado el mayor decidió mandarlo a su casa luego de que terminase de comer, quedándose así solo en la cafetería.

Al momento de llegar a su casa Chan dejó un camino tirando sus cosas y ropa hasta llegar a su cama y dormir al fin.

Y no fue si no hasta la tarde que el hambre feroz que tenía lo despertó y lo guió hacia la cocina, luego de comer y ordenar un poco se sentó a revisar sus mensajes.

El primer chat al que entró fue obviamente al de ChangBin, habían un par de mensajes del castaño esperando a ser vistos.

Binnie.

Buenas Channie~

Imagino que debes estar llegando a tu casa tal vez, me hubiera gustado acompañarte de nuevo:(

ᴀʀᴛɪsᴛᴀ ᴄᴀʟʟᴇᴊᴇʀᴏ | ᴄʜᴀɴᴄʜᴀɴɢ. Donde viven las historias. Descúbrelo ahora