슈짐 Gay Movie → [ ̶a̶̶d̶̶a̶̶p̶̶t̶̶a̶̶c̶̶i̶̶ó̶̶n̶ ]

Capitulo 40

Solo tenía un objetivo; llegar cuanto antes a aquel estudio. Pero cada vez se me hacía más difícil, miles de autos andaban por la carretera en este mismo instante, y aunque acelerara al máximo, no lo lograría. 

Cuando uno de los semáforos se puso en rojo, no me di cuenta hasta que casi choco al auto que iba al frente de mí, los neumáticos rechinaron al máximo, pero pude salvarme de ésta. Traté de calmar mi respiración y secar algunas lágrimas que aún estaban en mis mejillas. Pensé en Jin, en cada instante, también en Namjoon, y el sufrimiento que tuvo cada uno. Jin era un chico alegre, y muy cariñoso, su familia, era una de las mejores, cada vez que iba a aquella casa, me sentía como si esa fuera mi familia. Jin era hermoso, en todos los sentidos, era un amigo excepcional, nunca fallaba, siempre estaba a tu lado. Que esté muerto, me duele demasiado, y más aún que mi padre biológico sea la causa.

Es como si todos los delitos que él ha cometido, cayeran en mí. Como si yo fuera el culpable. 

Una ola de bocinazos me hizo sobresaltar, arranqué el auto, ahora algo más lento, mis manos aún temblaban y mis lágrimas seguían sin ceder. Cuando estacioné dentro de aquel estudio, solté un gran suspiro, había llegado vivo después de todo.

Vi como fotógrafos que se encontraban sentados, esperando que algo ocurriera, se levantaron de inmediato con mi llegada. Solo pude reaccionar comenzando a correr hasta el interior del estudio. Y aunque no logré salvarme de fotografías, me salve de las estúpidas preguntas que ellos hacían. 

Jessica quien estaba concentrada en su computador, levantó su mirada al sentir mi presencia, podía ver un gran moretón en su mejilla derecha, el cual estaba tapado con un montón de bases de maquillaje, lo sabía, porque muchas veces yo lo hice y sé exactamente como lucen.

Me acerqué hasta ella, iba a intentar entrar a la oficina de Jin Hee por las buenas, pero si ella se opone, entraré de todas formas, aunque llamen a todos los guardias del lugar. 

-Buenos días, YoonGi- ella intentó no tartamudear

-Hola, Jessica- saludé por cortesía, y aunque llevaba unos segundos aquí, ya comenzaba a sentirme incómodo 

-¿A qué has venido?- murmuró 

-He venido a ver a mi querido padre, ¿se encuentra?- ella se puso algo pálida al escucharme

-S-Sí, pero está en una reunión- titubeó

-No importa, cancelará la reunión, tengo que hablar con él- ella se mordió el labio nerviosa, iba a tomar el teléfono que seguramente conectaba con la oficina de Jin Hee, pero se arrepintió 

-YoonGi, está ocupado, no puedo interrumpir, es muy importante- por su expresión, puedo asegurar que está mintiendo

Sentimos que la puerta principal se abría, y miles de gritos de parte de los fotógrafos, uno de los actores estrella de este estudio, había llegado a trabajar. Miré a Jessica, quien se concentró en aquel chico, comenzó a buscar algunos papeles en sus carpetas. Cuando él estuvo a mi lado, me escabullí por el pasillo de las oficinas sin que ella se diera cuenta. Busqué la puerta que ya conocía bastante, cuando estuve al frente de ella. Tomé mucho aire, para luego girar la perilla y entrar a aquella habitación sin hacer ruido.

Mis ojos se abrieron más de lo normal, mi estómago se revolvió y sentí que el aire se esfumaba de mis pulmones. 

Jin Hee tenía a un chico sobre su regazo, no digo que se estaban besando, pero ¡se estaban besando!

Podría vomitar en este mismo instante, quería salir corriendo, pero ellos notaron mi presencia y se separaron de inmediato, Jin Hee empujó al chico tan fuerte que éste cayó al piso, golpeándose su trasero.