Capítulo 23

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En la mañana, Nala despertó algo cansada, tenía su cabeza encima de Sarafina. Se levantó y se sentó, como casi todas las mañanas. Los últimos días se estuvo despertando antes que su mamá. Ella esperó a que todas las leonas se despertarán. Al medio día Nala estaba lista para salir a cazar con las demás leonas. Antes llegó Scar y le dijo a Nala que quería doble comida porque lo que habían estado cazando no era suficiente para todos. Nala salió a cazar. Iban caminando hacia los campos que estaban en la mayor parte secos sin hierba. Se encontraron con una manada de venados. Todas se agazaparon y esperaron allí hasta que estuvieran lo suficientemente cerca para comenzar la persecución. Nala les hablo de que Scar quería más de lo que les habían estado llevando. Todas comprendieron e iban a intentar cazar casa una un animal. Los venados se acercaron y todas las leonas empezaron a correr a todos los venados que casi eran como 11. Lograron atrapar a 6, casualmente una leona no pudo cazar a un venado. Regresaron a la roca del rey y les dieron la comida a Scar y las hienas. Nala observó a un grupo de hienas que de llevaron una parte de la comida afuera de la roca del rey. Era el mismo grupo que vio el día anterior. Eran muy platicadoras, no pararon de hablar hasta que una hiena volteó a ver a Nala, ella se volteó rápidamente.
-Nala, vamos come-dijo Sarafina
-Si, lo siento-dijo Nala
Al terminar de comer Nala se echó al lado de Sarafina.
-Te amo hija-dijo Sarafina
-Y yo a ti mamá-dijo Nala pegando su cabeza con la de Sarafina.
En la tarde casi al anochecer, un extraño ruido atrajo a Nala hacia afuera de la roca del rey. Ella caminó hasta afuera.
-Nala-escuchó la leona
-Oye Nala-volvió a escuchar Nala
De repente aparecieron de atrás de unas rocas gigantes cuatro hienas.
-Hola Nala-dijo Edd
Edd saltó encima de Nala y la empezó a la mordió.
Nala se asustó y empezó a dar zarpazos. Repelió a la primera hiena. Las otras dos se lanzaron a la espalda de Nala y la empujaron hacia atrás, Nala cayó al suelo.
Edd saco sus garras que eran del tamaño de un cuchillo.
-Nooo-dijo Nala y lanzó a las hienas que tenía atrás y le dió un zarpazo en la cara a Edd.
La hienas trataron de rasguñar a Nala. Saltaron de nuevo a Nala y la votaron al suelo. Nala ya no podía sacarse de encima a Edd. Estaba preparado para apuñalarla. Dos hienas mordieron las patas delanteras de Nala y la dejaron inmovilizada.
-¡Nala!-Gritó Sarafina y quitó a las hienas de Nala
Las 4 hienas se lanzaron encima de Sarafina. Ella las repelió, pero dos se lanzaron a su espalda y la mordieron. Sarafina se quitó de un zarpazo a unas hienas que venían enfrente.
Saltó hacia atrás para quitarse a las dos hienas de encima. Las 4 hienas empezaron a darle rasguños en todo el cuerpo a Sarafina. Ella intentaba detenerlas pero eran demasiado rápidas. La lanzaron al suelo. Dos hienas tenían sujetada a Sarafina de las patas.
Edd llegó y se colocó encima de Sarafina y con sus garras apuñaló en el estómago a Sarafina.
-¡Aaaah!-Gritó Sarafina del dolor
La otra hiena hizo lo mismo del otro lado.
-¡Mamá!-Gritó Nala intentando acercase
De repente apareció Scar.
-Creí haberles dicho que no debían tocar a las leonas-Gritó Scar y les rugió.
5 hienas aparecieron detrás de Scar.
Las 4 hienas traidoras se fueron corriendo.
-Tras ellas-dijo Scar-no las dejen vivas.
Sarafina estaba sufriendo. Scar la miró e hizo una expresión de enojo.
-Grandioso-dijo Scar-una leona menos para cazar
Scar se fue.
Las leonas llevaron a Sarafina dentro de la cueva.
-Mamá, mamá te pondrás bien-dijo Nala asustada.
-Por favor, ten calma-dijo Sarafina con la voz baja-quiero vete tranquila
Nala con mucho esfuerzo sujetó la pata de Sarafina.
-Lamento que....hayas tenido que vivir esto-dijo Sarafina
-Oh no te preocupes por eso, más bien te lo agradezco-dijo Nala
-Nala-dijo Sarafina-por favor.....nunca te rindas
-No lo haré mamá-dijo Nala
Nala casi lloraba cada vez que decía su madre decía algo.
-Tu siempre ten en la mente que ganarás-dijo Sarafina con una voz demasiado baja
-Mamá por favor-dijo Nala
-Te amo Nala-dijo Sarafina
-Y yo a ti mamá, más que a nada en este mundo-respondió Nala
-Mi hermosa flor color crema-dijo Sarafina
Nala soltó una pequeña risa al escuchar esa frase que decía siempre Sarafina.
-Estas tan grande, sabía que serías....una gran.....leona-dijo Sarafina con dificultad
-Si mamá-dijo Nala
Sarafina con su pata sujetó la mejilla de Nala.
-Yo viví por ti, eres mi mundo, yo siempre estaré dentro de tí, jamás te abandonaré-dijo Sarafina susurrando.
-Te amo Nala-dijo Sarafina susurrando
-Y yo a ti mamá-respondió Nala
-Te......a.......mo-susurró Sarafina cerrando los ojos.
La pata de Sarafina cayó al suelo.
-Mamá-dijo Nala
Sin respuesta.
-Mamá-repitió Nala
-Mamá-susurró Nala casi llorando
Nala pegó su cabeza al cuerpo de Sarafina.
-Mamá por favor no me hagas esto-dijo Nala-no cuando mas te necesito
Nala levantó la cabeza.
-!Mamaaaa!-Gritó Nala
La leona comenzó a llorar desesperadamente, como nunca antes había llorando.
Las demás leonas solo observaban dolidas. Sarabi lloraba desesperada.
-Sarafina-dijeron unas leonas.
Era la realidad, era inevitable, era irreparable.
Sarafina había muerto.

El Rey León: La Historia de NalaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora