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Nicolas se llevó los dedos a su sien, masajeando de forma lenta y concisa. En esos momentos se preguntaba cómo hacía a diario para sobrevivir a sus amigos, porque estaba a nada de tirar el teléfono móvil a la basura si volvía a llegar otra notificación. Apenas hacía una semana que las cosas se habían arreglado con Tom y estaba anhelando la tranquilidad que les brindaba su privacidad, pero creía que su vida atraía los problemas como si fueran imanes porque el internet se estaba volviendo loco. Tan solo quería un minuto de paz, pero Liam no tuvo la decencia de esperar una hora para comentar en la foto de su novio diciendo que ellos eran, bueno, pareja. No creía que el comentario fuera tan malo. De hecho, si podría haber pasado como una broma cualquiera si le hubieran dejado ser, pero las reacciones de los demás estaban dejándolos en total evidencia. No sabía si estaba enfadado o asustado, por lo que solo pudo entrar a la publicación desde la cuenta de Tom y desactivar los comentarios como le dijo al otro que haría justo antes de que se metiera en la ducha. Aunque aquello no terminaba allí, porque le seguían los mensajes por directo, Twitter, las fans de Tom comentando en sus propias publicaciones pidiendo explicaciones, preguntando quien era y por qué se creía digno de salir con su ídolo. Simplemente increíble.
Escuchó el sonido de la ducha detenerse, por lo que se sentó en la cama mientras pasaba la mano izquierda por su cabello. Al abrirse la puerta del baño tuvo que tomar aire, ya que su novio salía de allí secándose el cabello con una toalla de tamaño mediano, vistiendo un pantalón deportivo oscuro y sosteniendo con su mano libre la camiseta que le había prestado para que usara. Le estaba diciendo algo sobre que aquella prenda le apretaba demasiado los hombros, pero Nicolas apenas y podía prestar atención a lo que estaba diciendo. Con lo preocupado que estaba en ese momento, distraerse un poco no le hacía para nada mal. Tom chasqueo los dedos frente a él con una sonrisa leve, intentando que escuchara sus palabras, por lo que Nick volvió a la realidad en un instante alejando sus pensamientos de cada endemoniada gota que caía por su torso.
—Me queda pequeña, ¿tienes otra? —pregunto dejando la camiseta blanca sobre la cama. No espero a que le respondiera, sino que directamente fue hasta su armario a buscar algo que le quedara más cómodo. Cruzando sus brazos con una mueca, Toubia apoyo su cabeza contra la pared mientras observaba su espalda desnuda, pensando en una buena forma de deshacerse de todo el drama que no quería que empezara—.
—Deberías subir una historia, tal vez riéndote, di que no deberían tomarse las cosas tan en serio —murmuró concentrado en una gota en particular que bajaba por entre sus omóplatos, entrecerrando los ojos—. Eso es lo que dijo Curtis en un mensaje recién —Tom giró su cabeza unos centímetros al oír el nombre de su mánager, consciente de que le había pedido al chico que se fijara si algo o alguien importante le contactaba mientras estaba ocupado—. De hecho. parecía bastante seguro, ¿no lo sabe?
Tom hizo una mueca mientras pasaba la toalla que llevaba en la mano por sus hombros y espalda.
—No necesita saber todo de mi vida —alzo las cejas, pero luego cedió ante la mirada del chico—. Aunque si, debería decírselo si planeo que se haga público.
