𝔠 𝔲 𝔞 𝔯 𝔢 𝔫 𝔱 𝔞

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—buenas tardes. —la fiscal Park sonrió al ver al señor que le acababa de abrir la puerta—, fiscal Park. —mostró su identificación—, ¿Se encuentra la señorita Hwang Eunbi?

—¿Mi hija? —el señor miró raro a la señora castaña.

—la misma, ¿Podría traerla a la puerta por favor? —su mirada se volvió de seriedad—, tengo una orden de arresto hacía ella.

—¿Qué? —el señor Hwang no entendía nada de lo que pasaba.

—papá, ¿Qué pasa? —la castaña se asomó a la puerta.

—¿Tú eres Hwang Eunbi? —la fiscal se dirigió a la menor.

—sí.

—bien, estás detenida por daños a la salud e intento de homicidio. —la señora esposo a la castaña.

—no puede llevársela, todo lo que dice no tiene sentido, ella es mi hija, ella no ha hecho nada. —el señor trato de evitar que su hija fuera llevada por la señora Park.

—es una orden de un juez, nos vemos en la comisaría, abogado Hwang.












—¿Estará bien sin yeso? —eunyi volvió a preguntar doctor.

—sí, el brazo no estaba del todo roto solo era una leve factura, era obvio que en estas 3 semanas rápido se recuperaría a parte el joven Bang es alguien muy sano su recuperación rápida era algo de esperarse. —el doctor volvió a repetir.

—ya escuchaste. —chan le sonrió a su novia—, estoy bien.

EunYi jamás sabría expresar de manera correcta lo mucho que amaba a ese chico australiano.

—ya está. —el doctor termino de quitar el yeso del brazo de chan—, ¿Cómo lo sientes? —el australiano comenzó a mover su brazo—.

—bien, no me duele. —sonrió.

—ok, solo te queda seguir tomando durante 1 semana tu medicina y no hagas movimientos bruscos con tu brazo, no quieres un yeso otra vez, ¿Cierto? —el doctor sonrió.

—muchas gracias. —ambos menores dieron las gracias al ver que el doctor salió del cuarto.

—¿Por qué te preocupas tanto? —chan se paró a lado de su EunYi.

—¿Y qué esperas que haga? —esta lo miro y con el ceño fruncido—, no me vuelvo a preocupar por ti, nunca te gusta nada. —hablo molesta y se sentó en la orilla de la camilla—.

—vas a matarme de un infarto si sigues haciendo estás escenas tan tiernas. —chan no podía contenerse de la emoción con toda la ternura que le causaba su novia.

—estas loco.

—por tí. —la abrazo—, ¿Te había dicho antes lo mucho que te amo? —miro de nuevo directamente a esos ojos que ninguna cantidad podía expresar lo mucho que los amaba—.

—¿Yo ya te lo había dicho? —pregunto con un leve color rojo que empezaba a colorear sus mejillas.

—te pusiste tímida otra vez. —sonrió.

—tu me haces sentirme así. —igual sonrió—, hazte cargo de ello.

—me haré cargo de ti toda la vida. —beso la frente de la pelinegra y se sentó a lado de ella.

 -𝐛𝐨𝐝𝐲 𝐜𝐡𝐚𝐧𝐠𝐞- || 𝐁𝐚𝐧𝐠 𝐂𝐡𝐚𝐧Where stories live. Discover now