—Tengo sueño —dijo Ni-ya moviéndose excesivamente sobre las piernas de mi amigo.

—Tu siempre tienes sueño —le dije alzando una ceja, sin mirarlo.

—No duermo bien es todo —se excusó cerrando los ojos mientras Hitsugi le acariciaba el cabello de manera indiferente.

Sentí la brisa pasear por mi cara, se sentía muy bien, en paz. Sin embargo mi momento de relajación se vio interrumpido por Kyo, quien se paró frente a mi con cara de preocupado. Ya sabía para que quería hablar conmigo, lo mas seguro es que estaba histérico por haber perdido contra Reita la ultima vez, pero de nuevo, ¿Qué culpa tenía yo? Ahora se iba a poner a exigir que le gane.

—Hola guapo, ¿en qué te ayudamos? —le hablé de forma sensual.

Kyo solo pareció molestarse mas, últimamente estaba muy estresado, aunque no nos había dicho por qué, presentía que tenía que ver con alguien llamado Toshiya. El rubio suspiró y se sentó frente a mi. 

—Tengo que hablar con ustedes —dijo con pesar. Ni-ya ni se movió pero Hitsugi y yo lo miramos para que supiera que tenía nuestra completa atención—. Estamos en problemas —empezó.

—Define problemas —Hitsugi permaneció tranquilo, aun no entiendo como era capaz de mantener la calma todo el tiempo y cuando digo todo, es todo.

Kyo torció la boca incómodo, parecía tener un debate consigo mismo, lo cual a mi de cierta forma me alteró. Me senté de manera correcta y esperé a que continuara, después de varios minutos por fin habló. 

—Es Toshiya, ya saben como es su situación familiar —por alguna razón no nos miraba sino al pasto—. El caso es que su papá le pidió dinero a la gente equivocada y ahora no puede pagarlo —explicó.

No me sorprendía y tampoco me molestaba, pero no entendía—. Y, ¿quieres que le prestemos dinero o qué? —dije, aunque era obvio que tampoco ese era el problema. Kyo tenía mas dinero del que podía gastar, pero hice la pregunta porque de verdad no entendía el rumbo de la conversación.

—No, —cerró con fuerza los ojos— Toshiya me contó lo que había ocurrido, me dijo que habían amenazado a su familia sino pagaban, por lo que me ofrecí a pagar la deuda —explicó. Incluso Ni-ya se levantó para prestar atención—. Ya saben, no tuve ningún problema en reunir el dinero y demás, el problema surgió cuando me entrevisté con este tipo —su voz comenzó a temblar ligeramente—. El tipo sabía quien era yo, al parecer tiene negocios dentro de las carreras o algo así. Me dijo que nuestro equipo y el de Reita lo estaban haciendo perder dinero, la verdad no entiendo como —se alzó de hombros—. El punto es que me dijo que la única forma de pagar la deuda de Toshi, era ganar las carreras para él —dijo tan rápido que casi ni entendí.

—¿Cuándo pasó? —Hitsugi tan monótono.

—Hace como seis meses —admitió agachando la cabeza—. Todo iba muy bien, porque no habíamos tenido que competir con los Gazette9, pero en las ultimas carreras perdimos y el señor no esta muy contento —hizo una mueca.

Sentí un tic en el ojo—. ¿Estás diciendo que estuvimos ganando dinero para un matón y no nos dijiste nada? —no sabía si estaba enojado o indignado. Digo no podía estar muy enojado porque después de todo, lo que hacíamos ya era ilegal—. ¿Estás loco? ¿Y si no hubiéramos ganado desde el principio? ¿Y si nos matan, golpean, abusan, nos hacen algo? ¿Por qué no dijiste nada? —mi voz se había alzado mucho de repente.

—Sakito, cálmate —sin notarlo la mano de Hitsugi me hizo hacia atrás para evitar que me levantara bruscamente—. Llevamos dos carreras perdidas, todas las demás las hemos ganado ¿Cuántas se supone que debemos ganar para que este tipo deje de molestar? —Hitsugi debería haber sido político con ese carácter tan diplomático.

Fast & Beautiful [The Gazette Aoiha]Where stories live. Discover now