Tan Diferentes. | Fruits Basket.

| Capítulo 7.

Pov [_____]

"—[_____]...me gustas." "—[_____]...me gustas." "—[_____]...me gustas."

Las palabras de Yuki seguían en mi cabeza. No podía pensar en otra cosa.

Me sonroje al recordar.

*Flashback*

— [_____]... me gustas. — Sostuvo fuertemente el abrazo por unos segundos más. Realmente no tengo la menor idea de cuanto tiempo estuvimos así. ¿Un minuto tal vez? No lo se. Mi cabeza se había quedado en blanco, hasta que el se se separó. — ¿No vas a decir nada? — dijo, notando así que había parado su llanto, pero que a cambio, se encontraba super rojo. — Tal vez es algo chocante, me di cuenta ayer, cuando no llegaste. Me quede toda la noche pensando lo peor...

— Y-Yuki... yo... — sentía el corazón en la boca.

— Te amo. Lo digo en serio. Los momentos que estoy contigo son hermosos. Eres de las mejores personas que he conocido. No espero que me respondas ahora. Hazlo cuando aclares todo. — se paro y se dirigió a la puerta. — Voy a estar esperando.

*Fin del Flashback*

Desde aquello he estado encerrada en mi habitación. Tohru me había llevado comida anoche. Le mentí diciéndole que necesitaba descansar mis heridas, aunque eso también era cierto, la mayoría se habían curado, pero aun tenia un pequeño moretón en el hombro.

En fin, la cosa es que Tohru hoy día salió al igual que Shigure, ella dijo que iba a visitar a su familia, pero se notaba desde lejos que mentía, y debido a esto solo estábamos en casa Kyo, Yuki y yo.

Ya son las 12 del mediodía, y necesito comer algo, pero no quiero salir por si me encontraba con... él. Seria muy incomodo.

No tengo la menor idea si es que yo siento lo mismo. Es decir, yo lo quiero mucho, lo aprecio, siempre paso buenos momentos con él. Cuando el me dijo lo que sentía, mi corazón se había agitado, ¿pero no es muy pronto? ¿Eso significa que te guste alguien? Además, si es que le correspondo, no se que me harían las chicas de la escuela. Me dejaron muy en claro que no quieren que me acerque al príncipe.

Finalmente me decidí a salir. Tarde o temprano lo tenia que enfrentar.

Salí silenciosamente, no se escuchaba absolutamente nada. Baje al primer piso, y observe un delicioso onigiri y varios acompañamientos.

Agarre el onigiri — Tohru... — dije instintivamente, suponiendo que ella lo había hecho.

— De hecho no. Fui yo idiota — a mi costado estaba el pelo de zanahoria.

— Buenos días.

— Buenas tardes querrás decir, dormiste demasiado.

Le di un mordisco al onigiri. — Y tu muy poco.

— Tsk. — bufó — ¿como van tus heridas?

— Bien, supongo. Ya sanaron la mayoría .

— La mayoría... ¿cual no? Te puedo ayudar, en las montañas siempre tenia que cuidar de mi mismo.

— Gracias, pero no es necesario. — dije y termine mi onigiri.

— Tranquila, no pasa nada. — se produjo un silencio — P-Puedes confiar en mi... — dijo cambiando la dirección de su mirada.

— Tu ganas, esta en mi hombro — baje un poco la manga. El se sonrojó.

— Voy por hielo. — salió por la puerta y unos segundos luego, volvió con lo que había dicho.