Leyendo: "Harry Potter, una historia diferente"

17. Borgin y Burken. (Parte 1)

- Pido leer el siguiente, tengo una idea de lo que sucederá - me dice George y Al le pasa el libro - Capítulo tres: "Borgin y Burken".

-¿Me pueden explicar cómo ustedes cuatros llegaron hasta la peor parte del Callejón Diagon? - nos pregunta mi abuela.

- Nosotros dos no fuimos - le dice Ron y señala a su novia.

- En nuestra defensa, fue la primera vez que viajábamos con polvos flu y no salió muy bien - agrega Harry.

- Y yo viajaba con él.

-¿No les pasó nada? - nos pregunta mi padre.

- No, salimos de ahí bastante rápido.

- Bien, eso me tranquiliza un poco más.

- El día del cumpleaños lo terminamos con una deliciosa comida para ambas familias y de postre el pastel. Conocimos al señor Weasley, un hombre alto, muy amable y muy parecido a sus hijos. Percy también salió de su habitación y lo noté un poco distinto, pero como siempre muy educado. A la hora de despedirme de mis padres fue sencillo, ya que ellos se sentían cómodos con la familia de mi amigo.

- Gracias por la confianza - le dice Arthur a mis padres.

- La Madriguera es como nuestra casa, siempre nos reciben con alegría.

- Es que somos una familia genial - le responde Charlie a Harry.

- De eso no hay dudas.

Con Hermione, teníamos pensado quedarnos una semana hasta que vayamos al callejón Diagon a comprar nuestro material para el segundo año. En cambio, Harry, se quedaría hasta ir de regreso al colegio.

Pasar tiempo con todos ellos se había vuelto demasiado agradable. Por las noches, con Hermione y Ginny, nos quedábamos hablando de cualquier cosa para conocernos más. Mientras que de día, los gemelos se sumaban para divertirnos en grupo. El señor y la señora Weasley, realmente, eran increíbles. Molly nos cuidaba y nos daba cariño como si nosotros tres también fuéramos sus hijos y a la hora de las comida, teníamos divertidas charlas con el padre de Ron, quien nos preguntaba sobre el uso de muchos aparatos muggle que parecían fascinarle.

-Ahora sabes que en el futuro habrá personas que estarán encantados de responder tus dudas - le dice Ron a su padre.

- Son charlas divertidas - agrega Herms.

- A demás, nosotros éramos curiosos por saber del mundo mágico - le digo al resto. 

Una mañana soleada, cuando llevábamos más o menos una semana en La Madriguera, con Harry los escuchamos hablar sobre Hogwarts. Cuando los cuatro bajamos a desayunar, encontramos al señor y la señora Weasley sentados con Ginny a la mesa de la cocina.

-Han llegado cartas del colegio - dijo el señor Weasley entregando a cada uno, un sobres idéntico de pergamino amarillento, con la dirección escrita en tinta verde - Dumbledore ya sabe que estás aquí, Harry; a ése no se le escapa una. También han llegado cartas para ustedes dos - añadió al ver entrar tranquilamente a Fred y George, todavía en pijama.

Con Hermione, se lo notificamos a nuestros padres, para ir el día siguiente al callejón Diagon.

Hay unos minutos de silencio mientras leemos las cartas. En la mía, me indicaban que tomara el tren a Hogwarts el 1 de septiembre, como de costumbre, en la estación de Kings Cross. Adjuntado, había una lista de los libros de texto que necesitaríamos para el curso siguiente:

Los estudiantes de segundo curso necesitarán:

-El libro reglamentario de hechizos (clase 2), Miranda Goshawk.