Duodécima nota.

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Lunes 28 de Enero

Joaquín había pasado todo el fin de semana escuchando la canción que le había dedicado A. En su rostro tenía una sonrisa que parecía imposible ser quitada y menos cuando encontró otra de las notas en su asiento durante la clase de matemática.

"Ocasionalmente te encuentro con la mirada perdida, tus lindas facciones cambian mostrando muchos sentimientos diferentes, y yo solo puedo quedarme pensando en qué pasa por esa pequeña cabeza. Mientras tú estás perdido viendo a la nada, yo estoy perdido en ti, siempre en ti.

En varias ocasiones mis amigos me preguntan en qué pienso, les tengo que responder que en nada. Ay, pequeño ángel, si tan solo supieran que esos nada siempre llevan tu nombre, probablemente me tacharían de loco enamorado.
Espera, eso es lo que soy.

12/17"

Las fórmulas, ecuaciones y pensamiento matemático pasaban a segundo plano cuando Joaquín leía una y otra vez esa nota, sobretodo la parte de loco enamorado. Si tan solo A supiera que comparten esa locura, quizá se animaría a hablarle antes, la espera era tediosa, pero sabía que valdría la pena.

Por dios, ¿qué cosa no valdría la pena si al final puede conocer al chico que logró que su corazón se acelerara y detuviera por simples notas?, definitivamente lo valía todo.

—Joven Bondoni, espero que esté prestando atención, porque con esa cara de enamorado no lo creo— evidenció el profesor y todos en el aula soltaron una pequeña risita, Joaquín solo se encogió un poco en su asiento.

—Que lindo eres, pequeño ángel— un murmullo un poco grave logró colarse en sus oídos, pero no reconocía la voz para nada. Ni siquiera trató de buscar al dueño de esa voz, sabía que era A y estaba lo suficientemente hipnotizado con ella como para pensar en algo más que en lo genial que sonaba ese apodo con su voz.

Emilio, sentado pocos asientos detrás de Joaco, no pudo evitar decir eso cuando vio la hermosa reacción de su ángel. Tampoco pudo evitar su sonrisa al ver que Joaquín lo había escuchado, también estaba nervioso, pero la felicidad de ver como el menor reaccionaba a su voz lo había enamorado aún más.

Y muchos podrían decir que eran suertudos por tener un amor correspondido, pero no solo era suerte, el destino estaba presente en cada latido sincronizado y en cada pensamiento compartido.

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Creo que ya solo quedan dos caps y el epílogo, así que espero que le den amorsh a la historia.

Yo solo quiero que ya se besen alm, pero aún falta:(

-Cam

17 notas (Emiliaco)Where stories live. Discover now