-Eso no tiene sentido, eres un nombre lobo, ¿Acaso no me quieres comer?
-El hecho de que un niño me esté amenazando con una pala y esté diciendo esas idioteces frente a mí me ofende.
×No apto para sensibles×
∆Bromamce
∆Namgi
∆Historia Corta
∆Fluff
∆...
Nunca había disfrutado asesinar, pero esa noche, por primera vez, cuando arremetió su pala contra el corazón del último hombre viviente, lo disfrutó. Lo distrajo por un momento de su dolor.
Miró a su alrededor, viendo el mar de sangre en el lugar, con las caras desfiguradas de aquellos que se hacían llamar EXO. Definitivamente le satisfacía observar del rostro irreconocible de Jong-in.
Se acercó a Namjoon mirando su rostro tranquilo, ajeno a la atrocidad que le rodeaba. Hasta podría decir que sólo estaba durmiendo si no fuera por sus labios azulados y la rigidez de su cuerpo.
Yoongi se acostó sobre él, como solía hacer las noches dónde tenía frío, y se aferró a su cuerpo enterrando su rostro en el cuello contrario.
Finalmente, empezó a llover. Las nubes amenazantes empezaron a vaciarse, llorando la muerte de Namjoon, llorando por Yoongi que no volvió a llorar, llorando por el fracaso de la luna, que aunque estaba escondida tras las nubes, veía que efectivamente, los licántropos habían ganado, pero en vez de sentirse triste, sentía felicidad, los hijos de la luna se habían salvado.
—Desearía jamás haberte conocido—susurró, preguntándose si tal vez así Namjoon no habría tenido un final tan triste, lamentándose por no haberse percatado que la sinceridad y pureza de su amistad también era amor, otro tipo ciertamente, pero igual o más poderosa. —Pero aún así, gracias por haber sido mi amigo, gracias por darme a conocer la felicidad. Prometo cuidar tu hogar y éste lugar. El manzano siendo mi testigo y guardian en tu eterno descanso. — juró bajo la lluvia, el bosque su único testigo, la luna escondida su única oyente.
El cuerpo de Namjoon empezó a brillar débilmente de un color morado, convirtiéndose en partículas de luz, desapareciendo entre el agarre de Yoongi, que impresionado por lo que veía, sólo pudo ver cómo se elevaba y desaparecía entre las oscuras nubes, dejando atrás un simple collar con un colmillo, con un grabado de un lobo morado sobre él.
Yoongi agarró el collar y lo contempló. Se lo colocó y caminó hacia la cueva de Namjoon, hacia ahora su hogar, dejando que el agua limpiara la sangre y suciedad del lugar.
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¡Al fin llegamos hasta aquí! Nos vemos en el epílogo~👀
