~•||Save me||•~KOOKV~•

||Lee Sea||

Llegamos a su casa y simplemente esperamos en el salón a que traigan la comida.

-DING DONG-tocan al timbre, y Tae va a abrir. Vuelve con dos cajas de pollo frito y dos de ramen, además acompañado con dos Coca-colas. Todo tiene muy buena pinta.
-¿Lo comemos aquí, o subimos a mi habitación?-pregunta él, esperando de pie.
-Aquí mejor-termino respondiendo.

Empezamos a comer como si fuera nuestra última vez, hasta que me doy cuenta de que hay algo que aún no me ha contado.

-Tae...-trago lo que llevaba en la boca-,¿por qué no me dijiste que tus padres no estaban de viaje de negocios?
-...-suspira y deja los palillos en el vaso de ramen. Deja de masticar, y mira hacia abajo-. Tenía miedo.
-¿Qué?, ¿de qué?
-Tenía miedo de que te acercaras a mí por el dinero.

¿Qué cojones?

-Ah...-digo simplemente.
-...Jungkook, no te conocía y no sabía cómo actuar-hace una pausa y me mira-. He tenido malas experiencias con mucha gente así.
-¿A qué te refieres?
-Muchas de las personas que yo consideraba buenos amigos, se juntaban conmigo para obtener beneficios...¿cómo decirlo?...Se aprovechaban de mí.
-Pero...
-Ellos me hacían pensar que podía confiar en ellos, incluso me invitaban a sus casas, pero luego todo eso se esfumaba-bebe un trago de coca-cola-. Me pedían favores, y yo no me podía negar. Eran mis únicos amigos y tenía miedo de perderlos..., fui un estúpido, lo sé.
-No no, no digas eso-le cojo la mano que está apoyada encima de la mesa y la aprieto-. No es tu culpa que esos tíos fueran unos capullos. Eres una persona increíble, y no te mereces que te hicieran eso.
-Lo siento por no confiar en ti al principio.
-Para de disculparte, ya te he dicho que no pasa nada-sonríe y le miro-. Pero aún no me has contestado, ¿por qué me lo ocultaste?
-Ya..., verás, yo soy hijo único y mis padres tampoco tienen gente de confianza, por tanto, toda la herencia cayó en mis manos-suspira-. Por eso te hice pensar que la casa y todo el lujo que había en ella era de mis padres, porque pensaba que tú serías como los demás.

Ahora tiene sentido.

-Entiendo...No te preocupes por eso, Tae. Yo nunca te haría algo así.
-Ahora lo sé-me sonríe y coge mi mano esta vez.
-Y...,¿cómo eran ellos?-me suelta la mano y se apoya en el respaldo de la silla, a la vez que suspira.
-Ellos...Bueno, hacían lo que podían. Nunca fueron especialmente cariñosos conmigo. Siempre se centraban en su trabajo y traer dinero a casa-bebe un trago-. Y claro que agradezco que me hayan dado una vida sin problemas, pero en muchas ocasiones en las que necesitaba un hombro donde llorar, ellos no se molestaban en prestármelo. Siempre me dijeron Taehyung, deja de quejarte por todo. Hay muchas cosas mayores por las que preocuparnos. Y tenían razón, pero a mí siempre me faltó su cariño-suspira y mira hacia arriba-. U-un día, ellos me dijeron que irían a Europa para una reunión de trabajo-se limpia un lágrima que ya corre por su mejilla y sigue-. Fueron a Alemania, Austria, Suiza y España, y siempre que veían monumentos o iban a algún museo, me mandaban fotos y me decían que ojalá estuviera con ellos para disfrutarlo todo-sonríe tristemente, y me siento en la silla que hay a su lado para rodear sus hombros con mi brazo-. Cuando terminaron su viaje, decidieron volver a Corea en crucero para así disfrutar un poco del viaje, ya que en Europa estuvieron la mayor parte del tiempo trabajando-sorbe con la nariz y mantiene la mirada perdida en el frente-. Me mandaron miles de foto desde el crucero. No paraban de sonreír. Parecían muy felices. De hecho, jamás los había visto tan contentos, y yo era feliz con ello-pausa-. Es verdad que nunca fueron cariñosos, pero al fin y al cabo, eran mis padres, y tanto sus sonrisas como sus llantos, me afectaban de una manera o de otra-mira hacia arriba para avisar que caigan más lágrimas-. E-ellos..., ellos un día me
llamaron...

-Flashback-

-PIRIBIRI PIRIBIRI.
-¿Sí?-conteste.
-Cariño...-su voz parecía triste.
-¿Mamá?, ¿qué pasa?
-Taehyungie-estaba llorando-. Necesito que hagas algo.
-Claro, dime.
-...V-ve a la habitación de mamá, y busca en el tercer cajón de nuestra cómoda...hay unas carpetas debajo de toda la ropa.
-Vale mamá, pero ¿pasa algo?-empezó a sollozar.
-Cariño..., siempre recuerda que te queremos muchísimo y que siempre estaremos contigo, ¿vale?-hubo silencio durante unos segundos-. Taehyung, cumple tus sueños. Sé quién quieras ser y que nadie te diga que no puedes-coge aire y sigue-. Eres la persona más fuerte del mundo, ¿vale?
-Mamá, me estás asustando...
-Príncipe mío..., sé feliz, por favor. Nunca te arrepientas de nada, ¿vale?-empecé a oír fuertes ruidos a través del teléfono-. Cariño...,mamá se tiene que ir, pero quiero que sepas que te queremos lo indecible. Disfruta cada segundo como si fuera el último, Tae-él volumen del sonido aumentó-. Te echaremos de me...-la llamada de cortó.