Just you and me

Confesiones

Tal vez, haber aceptado participar en aquel juego que bien tenía un aire inofensivo, no había sido la mejor idea de su vida. Aún no había llegado su turno y ya se estaba arrepintiendo; pues bastaba solo con ver los rostros de sus compañeros cuando les preguntaban alguna verdad, o les ponían algún reto, para lograr que sintiera escalofríos.

Todoroki miró a su pecoso, que se encontraba a su lado, mirando atento lo que sucedía. Ah, lo que hacía por su pequeño.

- ¡¿Están listos?! -la voz de Kaminari le sacó de sus pensamientos, haciendo que fijara su atención en la botella que se encontraba en manos del rubio- ¡Ahí va!

El objeto comenzó a girar, aumentando la tensión con cada vuelta, pues todos querían saber a quién apuntaría cuando se detuviera; todos querían saber quién sería el que mandaría y el que recibiría.

Después de un par de giros más, la botella se detuvo, apuntando a Yaozurou con la tapa, indicando que ella sería quien recibiera la orden, que sería dada, por nada menos que Ashido. La azabache estaba a punto de sufrir un desmayo de solo ver la sonrisa malvada de la peli rosa.

- De acuerdo, Momo-san -canturreó Mina, frotando las palmas de sus manos, ideando algún tipo de plan malvado, que hizo a todos los de la habitación contener el aliento.

Todos los de la clase se habían reunido en casa de Kaminari para celebrar su cumpleaños; pero después de un rato de baile y demás actividades, habían decidido realizar algo que les pusiera en su límite, un juego común entre estudiantes, en el que todos corrieran el mismo riesgo de sufrir algún tipo de vergüenza.

- ¿Estás lista? -preguntó la chica de ojos amarillos, disfrutando de generar tanto miedo en todos los presentes.

- Creo que si All Might estuviera aquí, también le tendría miedo... -susurró Kirishima a Katsuki, recibiendo como contestación un duro golpe en la cabeza y un grito de "¡Yo no le tengo miedo a la marciana! ¡Muere!" que hizo a todos suspirar con pesar.

- Sí, estoy lista... -respondió la chica a la que la tapa de la botella apuntaba, dictándole un destino vergonzoso, sintiéndose nerviosa y ansiosa porque su espera terminara.

- De acuerdo -sonrió más ampliamente la otra- ¿Verdad o reto?

Los presentes se dividieron, algunos le recomendaban elegir reto, para no tener que revelar algún secreto especial, con el que luego alguien podría molestarle, mientras que otros le sugerían elegir verdad para así no tener que hacer nada extraño y que le hiciera sentir incómoda.

- Ehh... -la chica de coleta suspiró, dudando un poco de su respuesta, hasta que por fin se decidió- verdad.

Hubo algunos abucheos y quejas al respecto, pero la mayoría asintió con aprobación, sintiendo que era la mejor opción, a sabiendas de que Mina sería la que escogería lo que sucedería a continuación.

- De acuerdo... -aceptó la de cabellos rosados, deteniéndose a pensar en lo que le iba a preguntar a su víctima- ¡Ya sé! ¿Yaozurou-san, alguna vez te gustó, o en dado caso, te gusta Todoroki-san?

La azabache se congeló ante la pregunta, sintiendo que todo a su alrededor comenzaba a girar, a la vez que su corazón se aceleraba, bombeando sangre a todo su ser, sin siquiera esperar a que los glóbulos rojos volvieran.

- Recuerda que no puedes mentir... -recordó la verdugo, disfrutando de las expresiones de la cuestionada, que se mantenía en silencio, con los ojos como platos y la boca levemente abierta.

- Ehh, pues... -comenzó a hablar la del quirk de crear objetos- podría decirse... que sí, en cierto modo...

- ¡¿Qué?! -la sorpresa fue general. Todos los presentes observaban con atención a la interrogada, al chico de ojos heterocromáticos y al peli-verde, que no sabía bien qué decir o hacer con todas aquellas miradas sobre él.

Todoroki instintivamente abrazó a su pecoso, en un modo de hacerle sentir que era él a quien quería que eso jamás cambiaría. Lo que logró hacer que Izuku se relajara en sobremanera, disfrutando de la calidez de su pareja.

- ¡¿Eh?! -Momo se dio cuenta de la interpretación que se le había dado a su respuesta, por lo que sintió los colores subírsele al rosto, a la vez que intentaba explicarse- n-no, no es lo que piensan... -tartamudeó, con una sonrisa nerviosa- Todoroki-san me gusta como persona y como héroe. Siento que puede hacer grandes cosas y le admiro por eso... No me gusta de forma romántica o eso...

Todos sus compañeros, exceptuando a cierto par de enamorados, miraron a la chica con incredulidad, como si quisieran revelar la verdad, pero luego de escuchar nuevamente las explicaciones de la peli-negra, la dejaron en paz, aceptando que no estaba enamorada del de cabellos bicolor.

- De acuerdo, sigamos -anunció el cumpleañero, girando nuevamente la botella, que volvió a ser el centro de atención durante unos segundos, hasta que se detuvo.

La víctima: Midoriya; el verdugo: Denki.

La tensión se convirtió por segunda vez en la reina del lugar; teniendo a todos expectantes, por lo que iba a suceder.

- Midoriya-san... -habló el rubio, con una expresión que lograba helar los huesos del pecoso, que tomaba la mano de su pareja con fuerza- ¿verdad o reto?

- ¡Reto! ¡Reto! -todos comenzaron a exigir la segunda opción, alegando que el oji-esmeralda no tenía ningún tipo de secreto que valiera realmente la pena revelar, pues encajaba demasiado bien en su etiqueta de niño bueno que nunca hacía nada malo.

- Bueno, a petición de todos, Midoriya-san, te quedas sin la opción de verdad -dijo el verdugo, sin lamentar de ninguna manera sus palabras, de hecho, hasta disfrutando pronunciarlas- así que, te tocará reto.

Shoto miraba a sus compañeros con el ceño fruncido, en modo de advertencia, ya que cualquier daño hacia su pequeño, sería razón para que él interviniera y era más que evidente que nadie quería estar en la mira de aquellos ojos heterocromáticos.

- Midoriya-san, te reto a... -Denki hizo una pausa, solo para disfrutar mejor del momento- sentarte en las piernas de Iida y darle un beso en la mejilla.

Tanto el mencionado, como la víctima, se sintieron acorralados por el resto de sus compañeros, que les observaban atentos y divertidos, esperando que el reto se cumpliera.

- ¡¿Eh?! N-no, n-no puedo... -tartamudeó el menor, observando a su amigo y luego a su amiga, que le devolvían la mirada.

- ¡Vamos, Midoriya! No creo que Todoroki se moleste solo por eso... -comentó Mina, secundando a su amigo que estaba más que orgulloso por su retro.

- ¡E-es que...! Uh... N-no es solo por eso... -explicó el peli verde, con sus mejillas encendidas en rojo vivo.

- ¡Oh, vamos hombre! -le animó Kirishima con su sonrisa de siempre- sólo hazlo rápido.

Deku se sentía demasiado ansioso, culpable por guardar aquel secreto y culpable por casi traicionar a su mejor amiga, aún sin siquiera haber cumplido el reto. No podía imaginarse a sí mismo haciendo tal cosa, así que decidió decir la verdad, confesar el secreto que llevaba guardando desde hace un par de semanas.

- Es que... -se mordió la lengua antes de hablar- ¡Es que Uraraka es la novia de Iida!

-

Perdón por el Iida x Uraraka :v

Ehh, ya sé que éste capítulo no tiene tanto TodoDeku, pero es para que no se hostiguen y eso UwU

Porque YA SE VIENE EL ROMANCE CHIDO, EMPALAGOSO, TODO KIUT, BIEN BELLO...

Ustedes saben 7w7 ;D

Bueno, eso es todo, nos veos mañana U3U