Un día dificil? (maggiecoln)

CAPITULO 47: UNA LÍDER DERROCADA

Maggie y Albert estaban en un café hablando la emo le había revelado todo el plan para presentarse y solo se limito a decir que no se llevaba bien con Lynn por razones tontas sin revelar todo el caos que estaban armando, Albert ya tenía una buena impresión de la chica y ver como se preocupaba por Lincoln lo mejoro aun más, el acepto ayudarles

—bien esperare que me digan que día podemos hacer esto, lo mejor seria en un almuerzo o una cena, mis nietas respetan eso cada vez que voy de visita incluso el tonto de mi yerno – a Maggie pero parecía curioso que la forma de expresarse sobre su yerno, un poco rencorosa, aun así ambos dejaron todo en claro y ella regreso a su casa ya en su habitación mando un mensaje a Lincoln avisándole del plan, con esto Maggie se sintió un poco más calmada recostó su cabeza en su almohada y miro la foto en su celular sus cortinas se agitaban por la suave brisa el ocaso estaba en su final y ella solo miro la foto con una sonrisa y una pequeña risa de alegría escapo de sus labios

—fue lindo visitarte... mamá – dijo ella cambio la foto a una de su madre con ella de pequeña sentada en sus piernas, usaba el gorro de policía con tanta inocencia, abrazo el celular y cerro sus ojos quedando profundamente dormida y conservando su sonrisa, esto fue notado por su prima Rachel quien miraba a escondidas ella reconoció esa sonrisa no era un picara o una de enamorada sino la sonrisa que ella tenía cuando era una niña que creyó que se había ido hace mucho

—muchas cosas cambiaron... - susurro con una voz algo cortada y con ojos húmedos miro a su hermano Hugh, ambos se regocijaron al ver de nuevo a su prima la que conocieron cuando eran más jóvenes, cuando la vida se veía fácil y ninguno de ellos debía preocuparse por malas noticias o regaños, cuando solo podían reír a carcajadas en aquel patio o compartir un momento de paz durante una lluvia calmada con tazas de café o té, mientras Hugh esperaba ansioso por que sus postres quedaran perfectos y el resto emocionado lo veían venir con aquellas delicias sobre una bandeja y Rachel simplemente miraba todo ese ambiente tan familiar, ambos se alejaron en silencio y dejaron que ella descansara

—es bueno ver que todo regresa – comento al bajar las escaleras, su hermana solo lo golpeo en el hombro y rio junto a el.

El ocaso termino y no todo era paz en aquel día pues una figura delgada estaba sentada en la semioscuridad de su habitación iluminado por una laptop, su mirada perdida y su mente asediada por pensamientos sobre lo que fue hoy lo motivaban aún más a juguetear con temerariamente con una daga que danzaba entre sus dedos con tal audacia, giros y piruetas daban paso a sus movimientos temerarios, mientras su ceño fruncido y sus suaves gruñidos quebraban el silencio de la habitación

—que demonios fue eso? – pensó mientras soltaba un suspiro, detuvo la danza de aquella daga y acerco su mano al aparato al cual apretó con suavidad un botón que reprodujo un video – que mierda me pasa... - gruño en sus adentros al ver a cierta joven de cabellos dorados gozando de un momento de placer con un hombre mayor - ¿Por qué me molesta...? Hace unos días pude verlo y me causo tanta risa, pero ahora me incomoda...

Con solo ver la cara sonriente de aquel maestro de segunda sentía como su sangre hervía y un sentimiento de desagrado hacia esa persona empezaba a crecer dentro suyo, de repente sus pensamientos y el video se interrumpieron cuando en su pantalla apareció el icono de llamada entrante, su rostro mostro desagrado al ver le nombre de quien lo llamaba ya que no podía rechazarlo

—hola inútil – respondió con tono arrogante aquel que lo llamo – padre pregunta si ya recogiste el dinero que te dejo en el banco

—si... - dijo secamente

—bien recuerda no gastarlo en estupideces, aunque creo que eso será difícil para un idiota como tu

—si, por cierto, me alegra que aun lleves ese recuerdo mío en tu bonita cara – contesto sarcásticamente haciendo que su hermano girara los ojos en direccion hacia una cicatriz casi invisible cerca su labio, volvieron a mirarse Ricky noto un ligero temor en los ojos de su hermano mayor