ᴇʟ ᴄʜɪᴄᴏ ᴅᴇᴛʀᴀs ᴅᴇ ʟᴀs ɴᴏᴛᴀs •KᴏᴏᴋV•

11.

Kim Taehyung.

Estaba yendo camino al parque en donde Jungkook había acordado, tenía muchas emociones a flote, pero también tenía cierto miedo de que solo se burlara de mi y pisoteara mis sentimientos.

Llegue al parque un minuto antes de las cinco. Me siento en un banco relativamente nervioso, mis manos sudan y tengo la necesidad de limpiarlas rápidamente con mi pantalón.

Marcan las cinco en punto y observó a mi alrededor no veo rastros de Jungkook.

Calmate Tae, apenas son es la hora.

Mientras espero, me dispongo a observar los detalles del parque, se encuentran niños jugando con sus padres, hay unas cuantas palomas siendo alimentadas por parejas de abuelos, y el relajante sonido de los pájaros.

Definitivamente debería venir más seguido.

Me elevo en mi mundo, sin darme cuenta que ya había llegado.

-¿Taehyung?-
Mierda... ¿Será muy tarde para salir corriendo?

Con los pelos de punta me levanto de la banca, observó detenidamente su atuendo, no me encuentro capaz de mirarlo a la cara.

Hoy esta más hermoso que nunca, traía una camisa negra pegada, haciendo notar su tonificado torso, y unos jeans ajustados.

-J-jungkook-
Traté de alguna manera sonar firme, pero cómo siempre, no pude.

-Con qué tu eras el chico detrás de las notas.-
En sus labios se dibuja una sonrisa, lo sabía, sabía que se iba a burlar de mí.

Asiento. De nuevo no me siento capaz de hablar, de igual manera me trabaria al hacerlo.

-¿Sabes? siempre supe que eras tu desde que empezaste a dejar tus notas en mi casillero-
Toma mi mentón obligándome a verlo, no podía asimilarlo, lo tenía justo al frente, su bella carita, sus facciones perfectas y ni de hablar de esos ojos brillantes que me observan fijamente.

-De alguna forma me atraes bonito siempre lo has hecho-

Quedo sorprendido antes sus palabras.
¿En verdad esta sucediendo esto?
No, tiene que ser mentira.

-¿E-esto no es un sueño?... ¿Verdad?-
Respiro profundo tratando de asimilar lo que acaba de decir.

Mis palabras salían a medias, la felicidad que ahora se tornaba por mi cuerpo era inexplicable, y el cosquilleo o las "mariposas" en el estómago se hicieron presentes.

Jungkook suelta un carcajada.

-No, no es un sueño, bonito.-
Se acerca poco a poco a mi cara al punto que nuestros labios se rozan, un escalofrío recorre mi espalda y al momento que nuestros labios se unen mi corazón palpita rápidamente, correspondiendo torpemente.

Fue un beso lento, en donde nuestras lenguas danzaban, disfrutando una de la otra sin prisa alguna. Nos separamos luego por falta de aire.

Este momento fue mágico, algo que nunca olvidaré.

-¿Y? ¿Lo intentamos?-
Ruedo los ojos divertido para luego golpear su hombro suavemente.

-¿Y tu que crees, tonto?-
Sonrió mostrando mi dentadura cuadrada.

Imita mi acción y vuelve a juntar sus labios con los míos.

Maldito seas tu y tu hermosa sonrisa Jeon.