Capítulo 28

25.2K 1.2K 325
                                    

- Calle, si no estás segura de es-

- ¿Me puedes hacer el favor de callarte? - Daniela tomó a Poché por el cuello y la besó.

Dani estaba hipnotizada por todo lo que significaba Poché. En muchas ocasiones sentía que el corazón no le cabía en el cuerpo porque lo que provocaba la peliazulada era imposible de procesar. La morena conocía a su novia y sabía lo mucho que le costaba ponerle una pausa a situaciones como en la que estaban, por eso agradecía tanto que le hubiera preguntado en varias oportunidades si estaba segura de lo que estaban haciendo.

- Por favor dime que pare si sientes que es demasiado - María José dijo antes de darle un beso que explicaba todo lo que no lograba decir con palabras.

Calle se movió para quedar abajo de Poché y le rodeó la cintura con las piernas para poder acercarla más a ella. Sus manos bailoteaban por la espalda de la peliazulada causándole pequeños escalofríos que acababan en sonrisas tímidas. Daniela sabía que extrañaba a su novia, pero no fue hasta ese momento donde se dio cuenta de cuánta falta le hacía el contacto con ella.

La boca de María José comenzó a deslizarse hacia el pecho de Calle y la respiración de ambas se tornó errática y acelerada. La calidez de sus cuerpos desnudos era adictiva y ninguna de las dos parecía ser capaz de controlar la necesidad de sentir cada centímetro de piel de la otra.

La lengua de la peliazulada encontró un punto especialmente sensible y le sacó tanto provecho como pudo, viendo cómo su novia luchaba por tomar aunque fuera una bocanada de aire. Empezó a bajar poco a poco siempre atenta a las reacciones de la morena, se había prometido a sí misma no hacer nada de lo que Calle no pareciera estar segura.

Cuando sus labios pasaron el ombligo de la chica, Poché levantó un momento la mirada para buscar aprobación en sus ojos. Se encontró con una mirada que parecía tener fuego y supo que Daniela estaba segura de lo que quería. Lento y con delicadeza María José se acomodó entre las piernas de Calle, pasándolas por encima de sus hombros para tener más libertad de movimiento.

Comenzó a besar con cariño el interior de sus muslos y sintió la desesperación de Calle cuando su mano la tomó del pelo con fuerza y la guió hacia su entrepierna.

- Deja de jugar - Dani dijo con un tono demandante.

Poché esbozó una sonrisa al ver la frustración en el rostro de su novia y deslizó su lengua exactamente donde la morena la quería, provocando un temblor inmediato en sus piernas.

Por la forma en la que Calle se movía María José sabía que no iba a faltar mucho más para que la chica terminara, así que haciendo algo que sabía que iba a costarle caro, se detuvo y comenzó a besar el abdomen de la morena hasta llegar nuevamente a su boca.

- ¡Poché! - Daniela le dio una palmada en la espalda.

- Tenemos toda la noche, confía en mí - la peliazulada le dijo al oído y luego le mordió con delicadeza el lóbulo.

María José la siguió besando, recorriendo con apetito las curvas de su cuerpo. Había esperado demasiado por ese momento y no iba a dejar que se acabara tan rápido.

Los músculos del abdomen de Dani se contraían cada vez que los dedos de Poché le acariciaban con sensualidad el contorno de las piernas y los sonidos que salían de su boca eran una muestra clara de que, realmente, la chica no quería más juegos.

- Te voy a matar - le dijo a la peliazulada con la voz entrecortada.

- No si yo te mato primero - Poché le hizo un chupón en el cuello que supo que tendrían que tapar el día siguiente.

VAS A QUEDARTE || CACHÉWhere stories live. Discover now