Capítulo 15 - Enlace

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POV Keegan

Se estaba haciendo tarde así que decidí prepararme para la cama. No sabía cuándo Theo planeaba hacerlo así que solo esperé en mi cama mientras leía. No le pregunté tampoco porque no quería hacerle sentir que tenía que irse a la cama por mi.

Pasaron unos minutos y se levantó de la cama, se dirigió al baño. Cerré mi libro y limpié el piso, guardé todos los dulces en mi bolsa. Cuando terminé de guardar mis cosas Theo había regresado a la habitación ... aún sin camisa.

"Espero que no te moleste si duermo sin camisa" Dijo dirigiéndose hacia su cama. Oh, Dios mío ... Tengo la sensación de que no podré quedarme dormido esta noche, me veo derritiéndome bajo las sábanas con ese pensamiento negué con la cabeza. ¿Quién era yo para negarle eso? Él está haciendo todo lo posible para asegurarse de que me sienta cómodo y para que no tenga terrores nocturnos.

"Está bien, me voy a la cama. Puedes saltar en cualquier momento, solo asegúrate de apagar la luz". Él me sonrió mientras se metía en la cama.

"Yo ... yo también me voy a la cama". Le informo caminando lentamente hacia la cama.

"Oh esta bien" Él respondió levantando las mantas por mí. Apagó la luz antes de meterme a su lado. Ya podía sentir el calor de su musculoso cuerpo empapando las mantas, me temo que pueda acurrucarme contra él esta noche como hice hace un par de días. Pareció tomarlo bien la primera vez pero no quiero hacerle creer que lo estoy haciendo a propósito.

Theo dejó escapar un gran suspiro antes de acomodarse en su almohada. "Buenas noches idiota". Se burló.

"Buenas noches Teodoro". Le devuelvo la broma en un tono soñoliento, él se rió y me dio un codazo haciéndome retorcerme, creo que realmente no le gusta ese nombre.

Y con eso nos fuimos a dormir; a pesar de mis preocupaciones anteriores.

Theo POV (Al principio del día)

No esperaba que Keegan se derrumbara como lo hizo cuando lo confronté sobre sus cortes, parecía realmente asustado casi como si fuera a atacarlo ... Lloró en mis brazos y sus lágrimas cubrieron mi camisa. Mi instinto se activó y lo envolví fuertemente en mis brazos, me aseguré de hacerle saber que estaba allí para él cada vez que lo necesitara. Después de un largo abrazo lo llevé a su cama y finalmente se calmó mientras él estaba recogiendo sus pensamientos pensé que sería un buen momento para desayunar. Corrí hacia el comedor y conseguí algo para comer.

En mi camino de regreso a la cabaña, me di cuenta de lo solitario y roto que parece Keegan, me encantaría ayudarlo pero él se guarda mucho para sí mismo aunque no voy a presionarlo para que me diga nada.

Keegan levantó la cabeza y me oyó entrar en la habitación, le di una débil sonrisa antes de entregarle la bolsa. Me dio las gracias por todo con su voz ronca, cualquiera podría decir que había estado llorando y no pude evitar sonreír. Me hizo feliz saber que él me apreciaba.

Pasé el siguiente par de horas recorriendo el parque comprobando si había algo interesante, noté que el gran fogón en el medio del parque había sido usado bastante. Supongo que aquí es donde muchos de los estudiantes quedan.

Había algunos lugares increíbles alrededor del parque que nunca había notado. A Keegan probablemente les gustarían, eso me dio curiosidad por saber por qué no ha pasado más tiempo al aire libre. Después de recorrer el parque me dirigí a la ciudad. No creo que se nos permita hacerlo sin un supervisor pero no me importa, esto me dio tiempo para ver todas las tiendas increíbles. Vi panadería tras panadería, los olores que emanaban de las diferentes tiendas me recordaban a Italia. Hace unos años mi padre me llevó de viaje a Italia y mientras recorríamos las calles podíamos oler los asombrosos aromas que emanaban de las puertas abiertas de las muchas panaderías ubicadas en la ciudad donde nos hospedábamos.

Esperanza rotaWhere stories live. Discover now