la vie en rose → jaeyong

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"Cuando me toma en sus brazos y me habla en voz baja veo la vida en rosa."


"¡Muchas gracias!", Taeyong y Jaehyun dicen en unísono a las personas que se encuentran a su alrededor con grandes sonrisas en sus rostros, Taeyong se pone en cuclillas para recoger el estuche de guitarra del suelo mientras junta las monedas y los billetes ahí reunidos, los guarda en su bolsillo y voltea de nuevo con su novio quien lo mira con una sonrisa grande.

"¿Cómo nos fue?", le pregunta Jaehyun con ojos brillantes de emoción.

"Muchísimo mejor que ayer", le contesta y siente como su novio se avienta a sus brazos, Taeyong pierde un poco el equilibrio pero se logra estabilizar y rodea su cuerpo en forma de abrazo.

De regreso a casa pasan a la tienda de conveniencia a comprar algunas cosas básicas que les hacían falta en su departamento y otras más para preparar la cena esa noche. De vez en cuando Jaehyun empuja un poco a Taeyong con diversión y él simplemente toma la mano de su novio y la lleva a sus labios para depositar un pequeño beso en el dorso de la misma.

Cuando entran a su departamento, Taeyong deposita el estuche con la guitarra cerca de la puerta y se dirigen hacia la cocina para preparar la cena, todo sin soltar sus manos ni un segundo.

Taeyong coloca los víveres en el refrigerador mientras Jaehyun corta los vegetales y empieza a tararear una canción que Taeyong conocía de memoria y que, básicamente, había formado parte de su historia desde que se conocieron aquella tarde de invierno hace 3 años.

Jaehyun siente las manos de su novio rodear su cintura así que voltea a verlo y coloca sus manos sobre sus hombros. Ambos se miran con los ojos brillantes y sonrisas en sus rostros, bailando lentamente mientras Jaehyun comienza a cantar:

"Des yeux qui font baisser les miens, un rire qui se perd sur sa bouche voilà le portrait sans retouches de l'homme auquel j'appartiens..."

Taeyong piensa en todo lo que han pasado él y Jaehyun hasta llegar a ese punto. El hecho de escapar del pueblo donde crecieron con nada más que el deseo de estar juntos sin tener que soportar los constantes reclamos de sus padres que les decían que una relación entre dos personas del mismo sexo era antinatural, llegar a una ciudad con nada más que unos cuantos ahorros que les permitieron rentar aquel pequeño departamento en el que seguían viviendo y que habían ido llenando poco a poco con muebles de segunda mano y memorias de amor.

"Quand il me prend dans ses bras il me parle tout bas, je vois la vie en rose..."

Jaehyun sigue cantando aquella canción y sus memorias lo remontan a aquella noche de verano en la habitación de Taeyong donde había cantado esas mismas líneas mientras veía a los ojos de aquel chico que se había robado su corazón hace ya 1 año pero al cual no se atrevía a decirle sobre sus sentimientos por miedo a que pensara de la misma forma en la que sus padres y le dijera que era un fenómeno.

"Il me dit des mots d'amour, des mots de tous les jours et ça me fait quelque chose..."

Taeyong piensa en ese primer beso con Jaehyun mientras este le cantaba esa canción en voz baja y lo miraba a los ojos. Ese día se había atrevido a decirle lo que sentía desde hace 1 año pero no con palabras, sino que con un beso que englobaba cada uno de sus sentimientos y en el cual encerraba también la promesa que, aún si el mundo estaba en contra de ellos, jamás soltaría su mano.

"Il est entré dans mon cœur une part de bonheur dont je connais la cause..."

Jaehyun recuerda la vez que Taeyong le había pedido ser su novio con una cena al aire libre. Había llevado su guitarra y le había dicho que quizá no sabía francés pero había aprendido los acordes de esa canción solamente para él.

"C'est lui pour moi, moi pour lui dans la vie, il me l'a dit, l'a juré pour la vie..."

Taeyong aún puede sentir la misma emoción cuando escuchó a Jaehyun decir que sí quería ser su novio y puede decir sin temor a equivocarse que esa misma felicidad que recorrió sus venas aquella noche, sigue apareciendo en él cada mañana que despierta a lado de su novio.

"Et dès que je l'aperçois alors je sens en moi mon cœur qui bat..."

Jaehyun piensa en aquella fatídica tarde en la que su padre se enteró de su relación con Taeyong y lo golpeó hasta dejarlo casi inconsciente. Recuerda también la preocupación en los ojos de su novio cuando lo vio llegar el día siguiente a la escuela con marcas por todo el rostro y la forma en la que lo había abrazado mientras acariciaba su cabello y decía en voz baja "nadie más podrá hacerte daño, yo te voy a cuidar para siempre" y, fue en ese momento que supo que había encontrado su hogar.

"Des nuits d'amour à plus finir, un grand bonheur qui prend sa place. Des ennuis, des chagrins s'effacent heureux, heureux à en mourir..."

Quizá Taeyong y Jaehyun no llevaban la mejor vida completamente llena de opulencias y extravagancias, ambos debían trabajar en lugares donde la paga era baja y cada noche salían al centro de Seúl para cantar algunas canciones y esperar que así pudieran darse unos lujos como cenar en un restaurante lindo alguna vez al mes o salidas fugaces al cine. Quizá no tenían el departamento más grande y lleno de muebles caros pero se tenían a ellos y a su amor; disfrutaban cada noche cantando porque era lo que amaban, adoraban llegar a casa porque era su pequeño refugio y nadie los molestaba, apreciaban cada pequeña salida que tenían aún si solamente era al parque cerca de su vecindario porque, más allá de querer tener una riqueza innecesaria, todo lo que ellos deseaban era poder disfrutar de su amor.

Juntos veían la vida en rosa.

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Este es una historia tierna porque todos siempre necesitamos un poco (mucho) de fluff en nuestra vidas.

¡Nos leemos después! uwu



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