Ruiseñor

Chapter One

Un joven de dieciséis años, recorría los solitarios pasillos del instituto Saint Patrick College. Estaba muy aturdido, tenía todas las emociones revueltas.

El chico de cabellos rojizos, de piel blanca como la nieve, con notables pecas en su rostro y ojos oscuros, había visto el cadáver del que fue su mejor amigo. Debajo de su cabeza se encontraba un gran charco de sangre, se había aventado del tercer piso del instituto. Había sido la cuarta muerte de la semana en el instituto y el cuarto cadáver que vio en ese lugar sombrío y oscuro.

Por culpa de esa horrorosa imagen empezó a sufrir una grave depresión .Las voces que escuchaba desde niño empezaron a aumentar. Ya no lograba razonar, le costaba hacer la mayoría de las cosas.

Se sentía derrotado, no podía mirar a nadie a los ojos, era deprimente. Nadie entendía el porqué John se había suicidado, pero al parecer estaban convencidos de que había decidido quitarse la vida.

Esa noche, soñó con su amigo, soñó que él lo miraba a los ojos y le sonreía, luego pasaba a una escena en la que John recogía sus libros rápidamente y subía los pisos del instituto como si tuviera algo pendiente. La última escena mostró que había pasado cuando llego al último piso. Una sombra, una sombra que aparentaba ser alguien empujo a John, el cual se encontraba mirando por la baranda .Su amigo cayo tres pisos e impacto de manera seca contra el pavimento.

Noah decidió pensar al instante de que su amigo había sido asesinado, y ahora tenía en claro que no había sido un suicido.

Otra vez las clases habían sido interrumpidas, por otro suceso sangriento, la joven Elizabeth de quince años fue encontrada en la cocina del buffet calcinada. Cuando el forense inspecciono el cuerpo de la joven, se encontró con un trozo de papel que estaba dentro del estomago de la chica.

Era una carta, de hojas amarillentas y fina caligrafía negra que lucia en esta, escrita con pluma en letra cursiva,  la cual decía:

Me pareció interesante dejar esta carta, tal vez los ayude a saber quién soy, o tal vez no, quién sabe.

Quiero que sepan que al igual que las serpientes, me gusta cambiar de piel. Lo hago casi siempre, pero nadie lo nota. Son todos tan ciegos .Nadie ve lo que esta enfrente de sus ojos. Pudieron haber evitado esto y las anteriores muertes, pero las detendrán ahora que yo deje esta carta. Se que les servirá como incentivo.

Y recuerden...

-No hay peor ciego que el que no quiere ver-

Atte: El ruiseñor 

Chapter Two ...

COMING SOON!!!

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