Bésame o Dispara. #Descontrol en la Realeza 3

Capitulo 31: Opciones.

Charlotte entró hecha una furia al palacio con Max pisándole los talones. Él estaba bastante divertido con su actitud. Era obvio que ella estaba enojada con él, y a eso había que sumarle que el que no la dejasen participar en la investigación de la desaparición de su prima, y le hubiesen ordenado mantenerse al margen y no hacer nada por su cuenta.

Max todavía no sabía cómo iba a contenerla, iba a ser una tarea difícil, pero como siempre, se esforzaría al máximo por mantenerla a salvo. Ella era inteligente, no la consideraba capaz de cometer ninguna locura, pero en situaciones desesperadas, las personas podían llegar a hacer muchas cosas sin pensar.

Seguido por dos gigantes, Nolan se apareció y cruzó en medio del camino de su hermana, haciéndola detenerse de golpe.

–¿Apareció?

–No –soltó Char con un suspiro y le removió el cabello–. No vayas a salir, Nol. Ten cuidado. ¿A dónde están tus primos?

–Han mirado las noticias todo el día y quieren regresar a su casa, Rob dijo que mañana se ocupará de llevarlos.

–Sí, no es un buen lugar para ellos en este momento. –Pero Nolan ya no la estaba oyendo a ella, sino que se había percatado de la presencia de Nash detrás de ella y a un par de pasos. Esbozó una sonrisa pícara dejando atrás su preocupación y caminó hasta él, deteniéndose con los hombros hacia atrás y luciendo mayor de lo que en realidad era.

–Señor Nash –saludó con seriedad.

–Alteza.

–Señor Nash –repitió–, creo que le debo una disculpa. Me comporté muy mal la última vez que lo encontré con mi hermana y no he tenido la oportunidad de disculparme. La verdad es que no planeaba perjudicarlo.

–No lo dudo, Alteza –musitó Max entre divertido y sorprendido por la actitud del chico.

–Charlie ha estado muy susceptible desde que usted se marchó. Y cuando digo susceptible, señor –puntualizó levantando un dedo y dándole una mirada a su hermana que esperaba que acabase con expresión de aburrimiento y los brazos en jarras–, me refiero a que ha tenido un humor peor que el de costumbre. Es bueno que haya regresado.

–Sí, bueno, pero no por mucho tiempo. ¿No es así, Señor Nash? –Intervino ella como si le presentara un desafío.

–Sigo las órdenes del rey, Alteza –contestó servicial, a sabiendas de que si había algo que Char odiaba, era eso mismo. Ese estúpido tono que no era más que una burla.

Nolan también lo sabía, y con la reacción de su hermana, bajó la cabeza y sonrió.

–Es usted muy valiente, Señor Nash. Muy valiente –remarcó antes de dar un par de pasos para alejarse. Pero como si recordara algo, volvió a girarse de golpe–. Ah Charlie, la abuela regresó. Está en su habitación y ha preguntado varias veces por ti.

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Emalene tenía otra dirección distinta a la que habían llevado a Kassie para entregar a Geraldine. No tenía idea del porqué, la búsqueda sería igual de implacable para las dos. Aunque sospechaba que los planes eran diferentes para cada una.