Muerta en vida

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Sé que vosotros habéis sentido aquella sensación en vuestra vida en el que miráis a vuestro alrededor y veis que nada es como antes; las caras de tus amigos y familiares están tachadas con grandes cruces de color rojo, impidiendo verles el rostro que una vez conociste, tus oídos parecen estar tapados por unas manos invisibles para no escuchar sus voces hasta que tu cabeza no recuerden como eran, esa voz en tu interior que tú siempre ignorabas y te gritaba aún más fuerte hasta llegar al punto en el que te volvías loco y destruías todo a tu paso.

Todas estas sensaciones no son de pura casualidad, significa que parte de ti esta mal e intentas disimularlo lo mejor que puedes mas siempre nos sale peor que cuando lo hacemos aposta, sientes el típico nudo en la garganta mientras aguantas tus ganas de llorar y piensas en lo que hiciste para acabar en el estado en el que estás, y nada más llegar a tu habitación y cerrar la puerta ya la tormenta se desata. También contamos con las largas horas noches de insomnio por las noches pensando en una solución posible o en un desdicho futuro en el que tu no estas presente las nulas ganas de comer y mucho menos de ir a trabajar o estudiar, admitámoslo, estamos cansados y hartos de arrastrar las cadenas atadas a nosotros a la que llamamos errores, decepciones, traiciones, pérdidas de compañeros y familiares, aguantar la sangre de las espadas y puñales en nuestra espalda y pecho y sonreír el máximo tiempo que pueda nuestra boca.

En ese momento es cuando tu ángel de la guarda ha perdido su fuerza y se esconde en la parte más oscura y fría de tu mente, atado con grandes cadenas con etiquetas y con heridas de batallas perdidas. Tu demonio toma el control de tus acciones y transforma tu cabeza en un gran infierno que ninguno puede imaginar, pero es posible calmarlo temporalmente con aquellas drogas a la que llaman medicamentos.

Al principio todos pensamos que es una pequeña caída y no le damos importancia hasta que, cuando nos damos cuenta, ya nuestros demonios han conseguido lo que quiere. Ahora solo tienes dos opciones: seguir luchando aunque te cueste la vida o matarte de la primera forma que se te venga a la cabeza. Todos sabemos que intentamos mantenernos firmes en estos momentos difíciles, ya sea porque aún quieres conseguir tus sueños, pero otros no tienen la misma suerte.

Es una lucha constante entre el bien y el mal; lógica y sentimientos; sal y azúcar; es una lucha entre tú y tus demonios.

Incluso, a veces llego a pensar, y siento, que mis propios demonios consuelan a mi ángel porque ellos también están cansados de que pueden hacer lo que quieren sin ninguna interrupción y así se les hace mas divertido ¿vosotros qué pensáis? A veces nuestra cabeza necesita tener unas vacaciones de vez en cuando, quitarse y deshacerse de todo el estrés que acumulamos durante años y estar dormidos por siglos y despertar como si naciéramos de nuevo.

Eso es lo que queremos ¿verdad? Desechar esos pensamientos negativos  y empezar de nuevo sin rencor o remordimiento, ¿quién no querría eso en esta situación?

Relatos cortos y poemasWhere stories live. Discover now