Respirando tu nombre [Jongkey]

6. Cigarrillo

Esta vez, Jonghyun no tuvo que utilizar su intuición para bajarse del autobús. La playa era el indicador que necesitaba para saber cuándo debía descender del vehículo. A pesar de que el día estuviera gris y que el viento azotara sus mejillas, él caminaba decidido hacia la superficie rocosa.

Caminó sobre las piedras y se sentó allí a esperar. No sabía si aparecería, o si pensaría que era una broma de mal gusto y lo dejaría plantado. Él conservaba las esperanzas porque siempre pensó que eso es lo último que se pierde. Miró las olas y no sintió miedo, al contrario, el ruido que producían lo hacían estar en calma.

Un olor comenzó a surgir de repente. Una persona se hallaba a su lado fumando un cigarrillo. Le preguntó algo en inglés que Jonghyun no entendió. El hombre rio y lanzó el humo fuera de su boca. Se sentó a su lado. Le hizo unas señas. Jonghyun entendió que el hombre le preguntaba si necesitaba ayuda, respondió que no. El hombre le preguntó si estaba triste y él respondió que no. El hombre le ofreció un cigarrillo y Jonghyun dijo que no. Ya rendido, el hombre hizo una simple pregunta: "¿Love?". Jonghyun asintió. El hombre dedicó una vista al mar y revolvió sus bolsillos. Sacó una hermosa piedra blanca y se la extendió. "For her", dijo el hombre, "for him" respondió Jonghyun. El hombre le sonrió. "For him", se corrigió.

El hombre se despidió de Jonghyun, pero en la ropa le quedó impregnado el olor a cigarrillo, algo que le recordó lo que había pasado hacía casi exactamente un año.

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El bar estaba poco iluminado y no había mucha gente allí. El olor a cigarrillo se extendía por todas partes. Algunos beodos recurrentes estaban tirados sobre la barra del local. La chica del bar los miraba un poco con nostalgia y negaba con la cabeza antes de continuar limpiando la barra esquivando los cuerpos tendidos.

Jonghyun estaba jugando con su vaso de whisky, hacía sonar los hielos, se concentraba para no pensar en otra cosa

—¿Qué fue lo que pasó?

La voz familiar hizo girar a Jonghyun para mirar sobre su hombro a la persona que estaba parada detrás de él. Jinki palmeó la espalda de Jonghyun y se sentó a su lado.

—¿Sabías que se iba? —preguntó Jonghyun.

—Nos enteramos con el mismo mensaje asumo.

—¿Y ustedes están muy tranquilos con eso? Se va a otro país y no nos dijo.

—Fue repentino, sí, no lo niego. ¿Pero qué cambiaría si lo hubiéramos sabido antes? Su sueño está afuera, siempre lo supimos

—Yo... nunca pude decirle lo que siento.

—¿Y qué sientes?

—Lo amo.

—¿Y cómo lo sabes?

—¿Has oído hablar de que todos tenemos un olor en particular?

—Sí, claro.

—Dicen que todos tenemos un olor especial, pero yo creo que todos los lugares y momentos se pueden anclar a un aroma. Siento un olor y me lleva a algún lugar en especial. A mí, todos los olores me recuerdan a un momento vivido con él. Todo me recuerda a él cuando no estamos juntos. Me siento de una manera tan especial que solo tiene sentido cuando pronuncio su nombre.

—¿Y qué esperas para decírselo?

—Me da miedo, no sé cómo debería decírselo. No quiero que se lo tome a mal. ¿Debería esperar hasta mañana?

—Por favor, no hagas la escena de ir al aeropuerto. O vamos a tener que cantar alguna canción romántica mientras corres porque el vuelo ya está por salir

Jonghyun rio y Jinki se alegró por haber animado un poco a su amigo

—¿Qué hago entonces?

Jinki se movió un poco en su asiento y sacó su celular tecleó rápidamente algo y lo colocó en su oreja.

—Kibum, alguien quiere hablar contigo.

Jonghyun tomó el celular torpemente y lo llevó a su oreja

—¿Hola? —se escuchaba del otro lado de la línea.

Jonghyun se quedó paralizado

—Jinki, no estoy para bromas — volvió a hablar Kibum.

—Bar —dijo Jonghyun un poco nervioso.

—¿Qué?

—¿Puedes venir hasta el bar cerca de tu casa? Soy Jonghyun

—Por raro que parezca, conozco tu voz —una risita se sintió del otro lado de teléfono—. De acuerdo, déjame arreglarme.

Jinki decidió irse antes de que Kibum llegara, sabía que lo que sea que tuviesen que hablar era un asunto entre sus amigos por lo que él no tenía por qué estar allí. Jonghyun se puso nervioso cuando quedó solo con su vaso de whisky, pero más se alteró cuando vio aparecer a Kibum, con su cabello mojado y unas pequeñas gotas que se deslizaban por su piel.

—Lo siento, tuve que bañarme rápido.

—No hay problema —sonrió.

—¿De qué querías hablar? —fue al grano.

—Lamento lo de esta tarde —Jonghyun jugueteó con su vaso de whisky—. Eres mi mejor amigo y te voy a extrañar mucho.

—Quizás yo debí ser un poco más valiente y decírtelo cara a cara.

—No me justifiques, estuve mal.

—Tienes razón, estuviste mal. ¡Siquiera te reíste de mi historia de Garçons! Eso que a ti te encantan.

Jonghyun rio y Kibum se alegró de que el momento de tensión se acabara.

—Sabes que estamos a un vuelo de distancia, ¿no? Pobre de ustedes que no vayan a visitarme.

—Sí, lo investigué.

Jonghyun se arrepintió de inmediato de haber dicho eso.

—¿En serio? —Kibum se sonrojó.

—Sí, ya te dije que te voy a extrañar.

Jonghyun apoyó su mano en la pierna de Kibum y la acarició. Kibum puso su mano sobre la ajena y realizó unas pequeñas caricias.

—¿Irás mañana a despedirme? —preguntó Kibum.

—Claro que sí, no te escaparás de mí.

Kibum sonrió y miró al suelo.

—¿No quieres quedarte en casa? Podemos decirle a los chicos que vengan, será la última noche aquí.

—¿No deberías descansar?

Kibum movió su mano en el aire como restándole importancia.

—Descansaré en el vuelo. Voy a escribirle a los chicos. Y vámonos de aquí, ya me cansé de ser fumador pasivo.

Jonghyun rio y se lamentó internamente de no haberle dicho nada a Kibum. También se sentía un poco triste por no poder pasar la noche a solas con él, aunque eso sonara egoísta. Se alejaron del humo, pero a Jonghyun le había grabado el recuerdo del arreglo.