LOS GUARDIANES DE LA LUZ [TERMINADA]

Capítulo 19 - El Comandante

Un hombre Estadounidense con armadura blindada y armada hasta los dientes y es impulsada por una energía roja, tiene sometido a inimaginable en el suelo quien está muy herido.

—¿Crees que este poder te pertenece? —decia el hombre mientras de uno de sus brazos salió una herramienta que le ayudaría a extraer los poderes del chico—¿Crees que porque eres un buen chico este poder es de tu pertenencia? —Entierra la herramienta en la espalda del chico y este grita de dolor—Yo le daré mejor uso a este poder ahora que se que funciona en humanos —El poder comenzó a ser extraído, Inimaginable siente como pierde sus fuerzas y su cuerpo ya no está sanando pero no puede permitir que alguien tan hundido en la avaricia gane, así que con todas sus fuerzas logra romper la herramienta y ponerse de pie, retrocede y se pone en guardia, se siente débil, le queda muy poco de su poder pero con el simple hecho de estar respirando le basta, Inimaginable se acerca a el con un puño, el hombre le responde con otro causando un choque entre ambos puños y una explosión de energía azul.

—Up child! —grita un guardia a inimaginable sacandolo así de sus pensamientos, el chico estaba sentado en una silla frente a una mesa de metal, tenía tiempo que el no iba a ese lugar, empezó a escuchar el arrastrar de cadenas para posteriormente ver cómo se abre la puerta, ahí estaba el, El Comandante, 1.80, cabello ligeramente rubio, cicatrices de guerra en brazos y manos, encadenado de pies y manos debido a que es un asesino profesional, por algo participó en Vietnam, y aunque suene un chiste o ficción, no se deja de hablar de aquella vez que lanzó una granada matando a 10 personas y después la granada explotó.
El comandante se sentó se sentó frente al chico, los guardias se retiraron, una vez solos el hombre comenzó a hablar.

—What are you looking for?

Inimaginable no responde.

—What happens? Did the mice eat your tongue?

Inimaginable permanece callado.

—What?! Are you deaf or stupid ?!

Inimaginable mostró una cara de regañado.

—Wait a minute, do not tell me... oh shit!

Inimaginable no contestó.

—¡Maldita sea! ¡¿Aun no sabes inglés?!

—No.

—Fuck you, para subir hasta el rango que llegue tuve que aprender mas de 10 idiomas diferentes y tu no puedes aprenderte la lengua que te enseñan en la escuela.

—Es que soy de un país tercermundista.

—Solo escucho excusas mediocres. Dime qué vienes a buscar de mi, todo lo que se dé la energía ya te lo dije.

—No es eso, yo… necesito tu ayuda.

—¿Y exactamente para qué?

—Esto será difícil de explicar pero; hay un ser que destruye universos que viene a la tierra y no puedo detenerlo solo y quería de tu ayuda.

—Me gustaría estar sorprendido, y recurres a mi porque el mago y tu opuesto no te quisieron ayudar.

—Enrealidad aún no les pregunto.

—What?… ¿Que?

—Si, quice buscarlos en el mismo orden que los conocí, primero tu, luego graphan y por último negativa.

—¿Y exactamente porque crees que te ayudaré?

—Te daré petróleo.

—¡Ay que chistosito! ¿No gustas un taco!

—Respondería a eso pero no vaya a ser que finjas que te ataqué.

—¿Temes que te quite tu tequila?

—Supongo que te decomisaron tu arma cuando ibas en la escuela.

—Y veo que tu si encuentras las salidas de emergencia.

—Obviamente las conoces bien, las usas cada vez que ves una maleta abandonada.

—Pues creo que sólo te faltan 43 razones para que te ayude, ¿No?

Inimaginable guarda silencio.

—Eso pensé, así que supongo que el trato será que me dejarás libre sólo si aceptó, ¿Verdad?

—No exactamente —Inimaginable se levanta de la silla, va con el comandante y le rompe sus cadenas.

—Aun no aceptó.

—Veo que un no entiendes la gravedad del asunto, todo el universo esta en peligro y yo soy el único que lo puede defender y apenas pude soportar una bomba atómica que me lanzaste que día, así que de nada sirve mantenerte encerrado, si no me vas a ayudar entonces disfruta tus últimas horas de vida —El chico se dirige a la puerta, pone una mano sobre el cuadro, mira hacia atrás y dice—No vine a pedirte ayuda para derrotarlo, si no para ganar más tiempo para las demás personas —Se retirá.

El comandante corre tras el pero ya no esta, corre por el pasillo y al llegar al gran salón ve en el centro su súper traje de batalla, reparado, pulido, uno de los guardias al verlo dice.

—I guess you're not going to use it anymore.