¿Te Daras Cuenta? (KevEdd)

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Y lo hicieron, llegaron a aquel destino tan deseado, bajaron de la motocicleta, era un bello atardecer, ambos habían llegado a la cima más alta de la ciudad, pudieron ver como se comenzaba a cambiar poco a poco el color azul del cielo a uno anaranjado con degradados rojos, estaban felices por poder pasar ese momento juntos.

-Bebé, hace un tiempo quería decirte algo...

—Dime.— Edd sentía una extraña sensación, a pesar de que no había tenia muchas grandes sorpresas en su vida sentía que este momento sería el más importante

—Sé que nuestra relación es completamente extraña, incluso dejando de lado el hecho de que ambos somos hombre, realmente no le importa, sé que tal vez en el principio hice que te sintieras inseguro y incluso confundido, yo también me sentía así, pero sin embargo y sabiendo que aún hay muchas cosas que vivir de que me gustas, me gustas mucho, realmente o quiero prometerte cosas que no cumpliré, pero si quiero decirte que quiero estar mucho tiempo contigo, te quiero, espero realmente que podamos estar juntos hasta que se acabe mi respiración.

Edd estaba perplejo, había visto muchas películas románticas en su vida, jamás pensó que esto se convertiría como en una, las palabras de Kevin tocaban su sensible y sincero corazón causando miles de emociones en el. No existe nada perfecto, pero el estaba seguro que esto era perfecto para él en este momento.

Kevin ya tenía su plan, se quedarían a acampar ahí, en la cima del monte viendo las estrellas. Ambos comenzaron a ayudarse a poner una tienda que el buen Kevin ya había preparado para ese momento, nunca se había sentido tan tranquilo, siempre había querido esto, tener una persona que lo ayudará a sentir cada una de las emociones humanas más profundas, nunca pudo imaginar tenerlas al lado de aquel pequeño chico que había conocido desde su niñez, pero en ese momento estaba seguro de algo, fue lo mejor que le pudo haber pasado.

—Te amo.- soltó sin más haciendo que la piel del azabache se erizara.- Edd realmente te amo, no entiendo como paso, pero estoy enamorado de ti, cada parte de tu ser y de tu cuerpo, jamás había sentido algo tan real como esto.- Edd guardo silencio un tiempo, pero finalmente hablo

—Realmente yo siempre te he amado y me llena escuchar que nuestro sentimiento es recíproco.- Suspira volteando a ver a Kevin y acercándose poco a poco, cuando llega a frente a el alza su mano para tomar su cara.- Aún recuerdo como me enamoré de ti, cuantas veces intenté olvidar mis sentimientos, todas las veces que lloré al pensar que mis sentimientos no serian correspondidos, pero ahora no puedo estar más feliz, te tengo conmigo.- Kevin corto la distancia entre sí para juntar sus respiraciones en un tierno y largo beso.

Después de todo aquello entraron a la casa para verse cara a cara mientras compartían mutuamente pequeños besitos de amor mientras se abrazaban u así quedar finalmente dormidos.
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Eran la 9 am, mientras que para el azabache era muy tarde para el pelirrojo realmente era muuuuuy temprano y se pudo ver por las quejas que soltaba

—¿Y si nos quedamos 15 minutos más?.- replicaba en forma de berrinche

—No.- decía con seguridad el azabache

—Amor por favor.- intentaba convencerlo intentando besos en toda su cara. No lo consiguió

Tenían un largo camino a casa, a pesar de que no habían dormido tan bien pues durmieron muy tarde, se sentían felices, Kevin manejando concentrado mientras sentía las pequeñas manos de Edd en su estómago le daban tanta ternura. Al llegar a casa del segundo abrieron la puerta ya que pensaron no habría nadie, grave error, al entrar comenzaron a escuchar fuertes gemidos en la parte superior de la casa, ambos quedarán muy consternados, sobretodo Edd ya que no comprendía el porqué pero decidieron subir y ver lo que pasaba, aunque ya se imaginaba el motivo.

Al abrir la puerta los dos chicos se quedaron petrificados ahogando sus gritos, hasta que por fin el pelirrojo habló.

—¿Ma...mamá?