Las voces se hicieron progresivamente más fuertes. Blaise y la nueva niña habían desaparecido y la mayoría de los otros estaban jugando un juego que implicaba beber de un vaso que levitaba, mientras que los otros participantes hacían todo lo posible por distraer lo suficiente al jugador como para que este dejara caer el vaso. Estaban empezando a emborracharse y la capacidad de atención estaba disminuyendo.

Era el turno de Flint de hacer levitar el vaso y la determinación en su rostro se mantuvo hasta que Draco mencionó algo sobre haberse follado a Armenda Fudham en el aula de Adivinación durante el sexto año. Esto hizo que ambos se carcajearan y el vaso de vidrio se rompió en el suelo.

Nott lo intentó después y se las arregló bastante bien, hasta que los demás se cansaron de su fortaleza y le hicieron cosquillas hasta que dejó caer el vaso. Ahora que había visto a los chicos de Slytherin haciéndose cosquillas, Hermione decidió que ya lo había visto todo en el mundo. Su mente automáticamente concluyó que debía contarle esto a Harry, el pensamiento la entristeció. Era gracioso, su mente no aceptaba que Harry ya no estaba vivo, pero no tuvo problemas para aceptar que Ron ya no figuraba en su vida.

Malcolm Baddock se unió a la fiesta. Hermione no lo había visto antes y él se giró abruptamente cuando la vio. Una espeluznante sonrisa se extendió en el rostro del hombre y Hermione se sintió realmente incómoda al verlo. Siempre le había parecido espeluznante y aparentemente eso no había cambiado. Los otros chicos parecieron recibirlo con entusiasmo.

Connie logró acorralar a Theo y después de una rápida conversación en la cual le acariciaba las solapas de la chaqueta. Ella hizo unas muecas coquetas y soltó un par de risitas mientras le susurraba algo. Theo le sonrió dulcemente y luego se inclinó y la besó en la mejilla. Lo que sea que Connie quisiera, lo consiguió. Hermione tuvo la impresión de que acababa de ver a una maestra en acción.

Connie le dijo adiós a Hermione y salió de la habitación. Ella estaba dejando la fiesta esa noche. De alguna manera, ella logró que Theo aceptara dejarla ir. Hermione ni siquiera se había dado cuenta de que irse era una posibilidad. Miró a Draco y se preguntó cómo podría hacer lo mismo.

Habían dejado de jugar ahora y estaban sentados, riéndose de alguna anécdota o broma. Flint azotaba ligeramente a una chica que estaba sobre su regazo, reprendiéndola de forma tan degradante y a ella parecía no importarle en absoluto.

Hermione consideró cómo debería acercarse a él. Tal vez ella sólo podría preguntar, decidió intentarlo y se acercó, él estaba completamente absorto charlando con los demás de todos modos, así que tal vez no le importaría si ella se iba del lugar. Cuando llegó allí, Draco la sentó en su regazo y Hermione se puso rígida como una tabla.

—Realmente necesitas relajarte, Granger —él arrastró las palabras—. Esta es una fiesta y te estás comportando como si esto fuera un funeral.

—Simplemente no es mi tipo de fiesta —ella dijo tratando de formular una estrategia para poder irse.

—Simplemente no te sientes cómoda fuera de la biblioteca ¿eh? —él preguntó y se rio—. Sólo tienes dos estados de ánimo, feliz y come libros.

Hermione estaba enojada y podía sentir que la ira aumentaba dentro de ella.

—Me gustaría irme ahora —Hermione dijo. Tal vez un enfoque directo sería lo mejor. Quizás estaba lo suficientemente borracho como para concedérselo.

—No lo creo —se rio aún más fuerte—. En serio, tienes que relajarte un poco Granger. Únete a la fiesta. No todo se trata de mostrarle a la gente lo frígida que eres.

—No soy... —ella comenzó, pero no continuó y sólo decidió bajarse de su regazo. Él la abrazó mientras ella luchaba.

—Esto debe ser corregido, vas a lastimarte. Creo que necesitas una lección —dijo y sacó su varita—. Imperio.

Absolutamente despreciableWhere stories live. Discover now