CAPÍTULO 2 - ENCUENTROS SORPRESA
Al día siguiente me levanto tarde, por lo que llego cinco minutos tarde al colegio. Eso me cuesta un castigo, por lo que en el descanso tengo que quedarme en clase haciendo tarea. Tampoco me importa, porque así no me cruzaré con Hannah. Las clases pasan demasiado lentas, sobre todo Historia, no la soporto, la profesora no para de hablar, y hablar. Cuando suena el timbre que anuncia el descanso, me quedo en mi sitio.
-¿No vienes?-me pregunta Meghan extrañada.
-Estoy castigada.
-Yo lo estoy constantemente, te doy mi más sentido pésame-me dice dándome una palmada en la cabeza, como si fuera un perro. Cuando la clase se vacía, me quedo asombrada cuando entra por la puerta Lucas, y se sienta en la mesa de detrás de mí.
-¿Por qué estás aquí?-me pregunta con una sonrisa que me deja muda.
-Po...or-me aclaro la garganta-por llegar tarde, y ¿tú?
-Por dibujar en clase de química.-contesta. Me quedo asombrada. Nunca pensé que a la gente popular como Lucas, que solo les gusta salir de fiesta, beber y fumar, por lo menos los de mi instituto, le gustara dibujar. Estoy a punto de decirle algo, cuando entra un profesor de guardia.
-Ya veo que no han aprovechado el tiempo-dice señalando a nuestros pupitres vacíos. Enseguida saco un cuaderno, y me pongo a hacer una redacción sobre la segunda guerra mundial, que nos ha mandado la profesora de Historia para mañana. "Así puedo hablar esta tarde con Aaron." pienso ilusionada, aunque sé que no debería. Diez minutos después, suena el timbre.
-Adiós-se despide con la mano Lucas. La verdad es que es muy amable, y guapo. "Lástima que sea de otro estatus social. Inalcanzable, nunca le llegaría a gustar, no soy lo suficientemente guapa." pienso algo desilusionada. Cierro mi libro y bajo al polideportivo a cambiarme para hacer educación física.
Llego a casa agotada, entre los ejercicios de educación física, y las dos horas de copiar, de después, he acabado muerta, aún me parece que veo palabras escritas en el aire.
-Cariño-me llama mi madre-lo siento, pero hoy no podrás utilizar internet.
-¿Por qué?-pregunto alarmada, ya que hablar con Aaron se ha convertido en lo mejor del día.
-Estamos teniendo problemas con la línea, vendrá esta tarde un técnico.
-Entiendo-contesto, entonces se me ocurre una idea-tranquila, iré al cibercafé, que hace mucho que no voy. Me siento en la mesa a comer más tranquila mientras espero que sean las siete, que es a la hora que se suele conectar, lo malo es que esta noche me tendré que despedir a las diez, porque es la hora a la que cierran. Desde que como, hasta las siete, la paso viendo la nueva serie de vampiros SPLIT en la tele, ya que estoy muy, pero que muy obsesionada con los vampiros, y todo lo gótico y fantástico en general, aunque no soy gótica ni tétrica, creo, y sueño con tener un final de cuento de hadas. Lo sé, soy bastante extraña.
Bajo al cibercafé rogando para que haya un ordenador libre. Veo uno al final del pasillo, y pongo ahí mi bolso, vigilándolo claro, y voy a la barra a pedir un cappuccino con vainilla, ya que es mi favorito. Entonces me encuentro a la persona que nunca habría pensado ver allí.
-Hola Lena-dice Lucas con su sonrisa angelical, mientras recoge su café.
-Hola-respondo sorprendida-¿qué haces aquí?-suelto antes de poder taparme la boca-o sea, quiero decir, vives muy lejos para venir aquí ¿no?
-Sí, pero un día descubrí este sitio, y me gustó, así que suelo venir por aquí a pasar el rato. Es relajante.
-Umm...bueno, ya no veremos-digo cogiendo mi cappuccino.
