Obedeciendo al diablo. Libro N°3 (Completa). Saga "Intensos"

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Kyra

La situación se pone un poco incómoda después de todo este lío, mejor dicho es vergonzosa
Cómo he podido caer en este dilema de los celos, nunca me creí capaz de esto, hasta me reía de ese tipo de personas, y aquí estoy, con el peor karma

Dejamos este abrazo y quedo mirando a un punto en particular

—¿Puedo preguntarte algo? —él luce más cómodo, y es él quien está en toalla. Asiento para poder escucharlo— ¿Sabes algo de esto? —observo como su mano toma el borde de la toalla para bajar el dobles

Me enojaría si esto fuera alguna clase de coqueteo, pero al ver un tatuaje en su cadera baja, puedo entender la pregunta

—¿Son alas? —comento con sopresa, no lo creí capaz de algo así

—Al parecer esto será otra interrogante para ambos, dulce hada

Coloca la toalla sobre su cadera nuevamente

¿En qué momento este idiota se hizo un tatuaje? Además el diseño, son dos pequeñas alas de Ángel ¿Qué clase de culto se ha metido?

—Ya debe estar listo la cena —con un guiño va hacia su armario. Me giro cuando lo veo cambiarse— . Mi madre hizo postres ¿Te gustan?

—Es la primera vez que comeré dulces de tu madre

—¿Antes no comías? ¿O te gustaban de alguna panadería en específico?

—Nunca he comprado dulces

Desde muy pequeña odiaba los dulces, pero con el embarazo mucho de mis hábitos y gustos han variado

—Entonces será tu primera experiencia

—No es así, sí como dulces, pero los hecho por ti

Recuerdo la primera tarta de mora, fue dulce y una sorpresa verlo en la mesa, estaba escéptica sobre querer comerlo, pero me gustó mucho cuando corté una rebanada, después llegó los panes, postres...

—Debe ser un honor cocinarte, pero ahora estoy en blanco, no tengo idea ni cómo freír un huevo

Jhon se coloca frente a mí, se ha vestido rápido para poder ir al comedor. Él sonríe mientras toma mi mano para guiarme hacia afuera

—Vamos —correspondo y voy con él

En la mesa, Alma y Óscar saludan al vernos, la mesa está decorado de pequeños pasteles. Me siento y cojo los rosados

—Mañana pensaba ir a la capital —el rubio al menos no ha cambiado con su disgusto a los dulces porque coje solo un taza de café, aunque es un excelente repostero— , quiero mostrarle algunos lugares

—Esta semana estamos ocupados hijo —Óscar parece más cansado de lo usual— , la próxima semana se aligera todo y podrán salir

—Es cierto Jhon, Kyra puede apoyarte en algunas tareas si la extrañas tanto —sigue Alma

¿Extrañar? Lo tengo pegado veinte y cuatro horas, cómo podría extrañarlo, más bien disfruto del poco tiempo separados