Parte 1

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                                 SIPNOSIS

Max Anderson deseaba tener una aventura con la hermosa joven que conoció ese día, afuera de su trabajo; no quería volver a tener una asistente, mucho menos una tan bella.
Jocelyn Rivera necesita encontrar un trabajo lo antes posible, lo último que necesitaba era iniciar una relación amorosa con un hombre como Max.

¿Qué pasará cuando Max y Jocelyn se conocen por casualidad?

¿Terminará Max arrepintiéndose de haberle dado trabajo a una desconocida?

Acompáñame a descubrir lo que el destino tiene preparado para esta pareja que se conoció Por Casualidad.
    
                                 * * * *  *




"Las oportunidades son como los amaneceres.

Si esperas demasiado tiempo, las hechas de menos."

   ~William Arthur Ward~



Max al pasar por la puerta principal de su trabajo ,escuchó el claxon de varios autos y se asomó a la calle para ver quién o qué estaba causando el embotellamiento. En esa sección de la calle había un pabellón y si alguien estaba bloqueando el paso, los demás vehículos no podrían avanzar.

Al ser esa una zona industrial por lo general la mayoría de las personas que la transitaban tenían prisa por llegar a su destino. Al echarle un vistazo a la calle, se percató que había una fila de conductores ansiosos esperando detrás de un coche gris; por la pintura desgatada y el modelo supo que era un coche viejo. Del cual vio salir a una joven atractiva, por el gesto que tenía y al verla frotar sus manos sobre sus muslos supuso que estaba nerviosa.

La joven había intentado en vano volver a encenderlo, y al no lograrlo, ahora se estaba disculpando con el conductor del coche que estaba detrás del de ella. Al verla, otro conductor y unos trabajadores de otras compañías se ofrecieron ayudarle a mover el coche al primer estacionamiento libre que vio.

Max no hizo el menor intento en ir ayudar a la joven, primero porque no necesitaba más ayuda. También porque estaba demasiado ocupado viéndola y tratando de entender que hacía alguien como ella, manejando un coche viejo y deteriorado. La observo bajarse después de estacionarlo y nuevamente les dio las gracias a quienes le ayudaron. Casi enseguida la vio entrar en el coche, apoyar su cabeza en el volante y poco después dar ligeros golpes con su cabeza.

Max estaba a punto de regresar a su trabajo cuando la vio bajarse, pero se detuvo. Porque pensó que la iba a ver abrir el cofre, sólo para ver la máquina, porque no iba a ver una flecha que le indicara que estaba mal y, aunque la hubiera, de todos modos, ella no sabría que hacer; algo que le parecía gracioso. En vez de eso, la joven se recargo en un costado del coche y comenzó a hablar por teléfono.

Al colgar, la vio hacer gestos y pasar las manos por su pelo castaño obscuro y super corto. Se dio la vuelta para ver el coche, apoyó sus brazos extendidos y alternó las palmas de sus manos para hacer ruido al tocar el techo del coche. Después de un rato, ella se dio la vuelta, se recargo una vez más, pero con los brazos cruzados. Por alguna razón, el estar observando aquella joven lo inquieto y prefirió regresar a trabajar, confiado en que en cualquier momento alguien iba a ir por ella.

Poco después, Max salió hacer unas diligencias y por alguna razón lo primero que hizo fue buscar el coche viejo que había causado el embotellamiento y a su hermosa conductora. El coche seguía donde mismo, pero a la joven no la vio por ningún lugar, por lo cual se imaginó que algún conocido o familiar había ido ayudarle y que después alguien regresaría por él.

Por CasualidadDonde viven las historias. Descúbrelo ahora