Bloodline [Vampiro/Jikook] EN EDICIÓN

9| Mensajes

🌹 | J u n g k o o k

Había pasado poco más de una hora desde que Jimin salió del departamento. Su teléfono sonó unas dos veces durante ese tiempo. Siendo esta la tercera vez que sonaba, me harté y fui por el celular para apagarlo.

Grave error.

Al sostenerlo, la pantalla se encendió dejando ver los mensajes que le habían llegado. No era mi intención leerlos, pero cuando vi mi nombre en una de esas notificaciones, supuse que los mensajes se trataban de mi. Simplemente no pude detenerme.

Los mensajes venían de la aplicación de iMessages y eran bastantes que venían de una persona llamada 'Nam'

Nam:
Ya es suficiente de tu berrinche Park
Nam:
Vuelve a casa, Mae está preocupada
Nam:
Ese humano es solo un capricho

Este tal "Nam" me parecía un tanto extraño, sin duda nunca había visto a una persona referirse a otra como «Humano».

Nam:
¿Cuando piensas decirle la verdad a Jungkook?
Nam:
¿Crees que se quedará a tu lado después de que lo sepa?

El último mensaje me dejó fuera de contexto, ya que está persona estaba hablando de un secreto y sonaba como uno muy malo. Esos mensajes me trajeron una gran confusión, al parecer el sujeto con el que acababa de besuquearme dos minutos atrás escondía algo que podría hacer que me alejara de él, ¿Pero que podía ser? No era experto en psicopatas pero Jimin definitivamente no parecía uno.

No me di cuenta cuando los pasos se acercaban a la puerta para que después está se abriera y Jimin apareciera detrás, con una expresión más relajada. Por suerte, cuando él entró no me estaba prestando atención por lo que pude dejar el celular sobre la mesa disimuladamente. Justo a tiempo antes de que el volteara a verme.

—¿Sigues despierto?—preguntó Jimin mientras se paraba del otro lado de la mesa con las manos dentro de sus bolsillos. Pude notar que tenían el labio inferior partido.

—A-ah si.— me rasque la cabeza.—Me dejaste preocupado cuando saliste—le sonreí.—Así que decidí esperarte— Jimin no se movió de su lugar.

—Estoy bien, ahora descansa.—dijo Jimin, cubriéndose el labio, luego me dio la espalda.

Jimin se acercó a la mesa, tomó su teléfono y cuando miró la pantalla, supuse que notó todos los mensajes que yo ya había notado. Sin decir nada, me miró, una mirada que no supe interpretar. Después solo me dio la espalda y se sentó en la barrita que estaba en medio de la cocina, haciendo lo que yo suponía que era contestar sus mensajes.

—Buenas noches Jimin.— le dije, esperando a que se volteara y me viera con esos ojos azules, no lo hizo.

—Descansa Jungkook.—me repitió enfrascado en la pantalla de su celular.

Trate de deducir su lenguaje corporal mientras él veía su teléfono, algún gestó que me ayudara entender lo que estaba haciendo, ¿Que habrá contestado a los mensajes? ¿Los habrá ignorado?

No hubo nada.

Simplemente me retiré de la sala y fui a mi cuarto. Cerré la puerta detrás de mí y me recargue en ella, tratando de controlar la ola de emociones que amenazaba con tragarme. Esa noche no pude dormir por distintas razones: 1-Tenía a un desconocido durmiendo en mi cama; 2-Me había besado cachondamente con ese desconocido; 3- Podía escuchar sus pasos caminando por la sala; 4- Un presentimiento retorcido seguía en mi corazón.