Capítulo 8
Llegué a la oficina después de dos transbordos de metro, creo que era de las pocas veces que llegaba tan temprano, ni siquiera Fer estaba en la recepción. Me dirigí a mi despacho, mi jefa no iba a estar hoy, llegaba el lunes de su viaje, hoy debería de ser una mañana tranquila. Abrí el ordenador y me senté, encontré varios correos, sin mucha importancia, un mensaje en el contestador de un publicista que quería contactar con Macarena. Ordené algún papel en carpetas y los llevé a la sala de reuniones para tenerlo listo allí mismo la próxima semana.
- ¿Vienes a tomarte un café?
Me giré hasta la puerta, Inma asomaba la cabeza, me puse un poco nerviosa, volví a mirar las carpetas y volví a ordenarlas.
- ¿Estás bien? (La miré de nuevo, dio unos pasos entrando a la sala)
- Sí. (Sonrió)
- Resaca, ¿verdad? (Bajé mi cabeza)
- Un poco...
- ¿Has visto a Fer? (Negué con la cabeza y rio) Tiene una cara... (Volvió a reír)
- Fue una gran noche, ¿No? (Bajó la cabeza y asintió)
- Para algunas seguro que mejor que para otros...
Fer, asomó su cabeza por la puerta, Inma giró la suya para mirarle.
- Si lo dices por mi... (Fer le asintió acercándose a ella) Estás equivocado.
- ¿Y eso?
Sí, pregunté yo, rápidamente, un segundo después me di cuenta que no había hecho, demasiado tarde.
- Nada importante...
- ¿Nos tomamos un café?
Fer me miró, Inma volvió a bajar la cabeza, asentí. Dejamos la sala de reuniones atrás y nos acercamos a la pequeña habitación para los descansos. Saqué los cafés de la maquina mientras ellos se sentaban en unos taburetes altos, Fer se quejaba de su dolor de cabeza e Inma le recordaba que se había bebido 'hasta el agua de los floreros'.
- Yo no soy el único eh... (Me giré con un par de cafés en mis manos)
- ¿Lo dices por mí? (Pregunté ya que me estaban mirando fijamente)
- Por ti, por ti. (Me sonrojé)
- No fue para tanto...
- ¿Dijo algo José?
- ¿Sobre qué?
- No sé... llegaste tarde, con un poco de alcohol en el cuerpo... (Alcé una de mis cejas)
- No... nada...
- Es un partidazo.
- Es un chico normal, no tiene por qué opinar de lo que hago o no con mi vida.
- Hombre... (Me miró de reojo Fer) Va a ser tu marido.
- Eso no quiere decir que me tenga que controlar, ni preguntar ni mucho menos cuestionarme, José no es así.
- Tengo ganas de conocerle. (Dijo Inma)
- Mira, podéis hacer un encuentro de parejitas.
Miré a Fer que sonreía, di un sorbo de café, moví mi vista hasta Inma que también dio un sorbo.
- Cuéntanos. (Le dijo Fer)
ESTÁS LEYENDO
Pidiendo una tregua
FanfictionMálaga no puede ser mejor escenario para una historia que solo ha hecho más que empezar... pidiendo una tregua. 'Que me he visto por la espalda y no me conocí, masticando vida nueva que no me tragué, he llenado de arena mis ojos, cuidé mis despojos...