cuatro

75 12 2
                                    

Sus ojos marrones escaneaban perfectamente mi rostro sorprendido y malhumorado.Podía saborear el perfume que estaba impregnado en su piel,ese aroma a almizcle.Esto no es casualidad,esto es el destino.Sí,soy de esas personas que creen en el destino,karma y esas cosas que otra gente diría que son tonterías,pero yo lo creía.

No me merezco perder el tiempo con él pero aquí me encontraba,con uno de mis peores enemigos de South Side,esperando a que Mederith apareciera con mi chocolate aunque eso parecieran horas y horas de espera.

Se quitó su gorra negra resguardando su pelo húmedo y alborotado.Dejó la gorra en la mesa y apoyó su barbilla en las dos palmas de la mano,esperando a que salieran palabras de mi boca.

-¿Por qué estás aquí?-conseguí pronunciar fijando mi mirada al tatuaje que tenía en el brazo izquierdo.Era una frase,seguro que muy significativa para él mas no podía alcanzar a leerla del todo -.¿Me persigues?

-Cariño,no perdería el tiempo en seguir a una persona como tú,tengo cosas más importantes que hacer en mi vida -farfulló entre carcajadas.

-Dirás en tu arruinada vida-concluí imitando su postura.Ahora mi vista se dirigía hacia sus ojos.

No era muy buena descrifrando a personas,y menos a las que no conozco;no me conozco ni yo.Pero en sus orbes se veía la soledad,esa soledad que tanto amenaba y dolor.Esta claro que Liam Payne es un libro cerrado,difícil de entender.Una parte de mí quería averiguar la tan ansiada vida de Liam,esa actitud que a muchas chicas le gustaba,por otra parte quería alejarme ya que un presentimiento me dice que me traerá problemas y mucho sufrimiento.

-¿Acaso la tuya es especial Cassandra?-suspiró.El aroma a menta se filtró por mis fosas nasales.Uno de mis olores preferidos era la menta,y sé que esto es un punto bajo a la hora de pensar con claridad.

-No me llames Cassandra -amenacé apretando mis dientes.Odiaba mi nombre completo,prefería Cassie-.Hemos quedado que no volverías a decirlo.

-Lo sé,pero me gusta ver como te pones roja por la furia-sonrió jugando con la gorra-.Me gusta verte así,estática en el sitio,como una pobre presa que será cazada por su depredador.

Dichoso Payne.Todo era entre nosotros gris oscuro,un color apagado e impasible;no todo es blanco o negro.Cada vez que estaba con él mis sentidos me alarmaban sobre su conducta hacia mí,como si un desprecio por parte de él,un sufrimiento de su pasado quisiera molestar mi conciencia,hacieneo que gozara sobre el placer del ver doloridos a otros.

-Si no tienes nada más que decir,puedes irte Liam,quiero tener un poco de espacio-dije aferrándome a mi caluroso abrigo.Estaba íntimidada por su presencia y más ante su mirada.

-Te dije que nos volveríamos a ver-sonrió de lado volviendo a dejar la gorra en la mesa.

-Vaaaaya...-bufé irónica medio riendo.

De pronto,Mederith apareció con dos tazas en la mano,una de chocolate y otra de café.Miró primero mi anatomía y luego dirigió su vista hacia Liam,el cual estaba apoyado en el respaldo con los brazos extendidos,observando a la rubia.

-¿Venís mucho por aquí?-comentó de repente.

Volvió a mirarme confusa Mederith y añadió:-Supongo-encogió sus hombros.

-Perfecto-dijo sonriendo.Se levantó del asiento apresurado y contempló por segundos la ventana donde antes estaba esa pareja tan encariñada.

-¡Liam!-gritó una voz desconocida a lo lejos.Era grave y áspera-.¿Te he dicho que puedas descansar?

Liam trabajaba aquí,¿esto era obra de una broma pesada?

-Me tengo que ir,asuntos del trabajo-repitió el mismo suspiro que antes señalando la cocina.Hace unos minutos estaba irritable y ¿ahora está normal?

sleep late → payneWhere stories live. Discover now