¡Peligro! Nerd a la vista| Lola#1

Capítulo 26

-Tranquila Lola. No hagas algo de lo que después te arrepientas...- advirtió Martina con miedo.

-¡CUANDO ENCUENTRE ESA PERRA, ME LAS VA A PAGAR!- Megan siguió gritando desde afuera.

-Allá está otra vez- asentí mientras empezaba a caminar en dirección a la salida del salón.

Caminé por el pasillo con mis amigas a mis espaldas, una preocupada y la otra enojada.

-¡Acá estás!- Megan me señaló entrecerrando los ojos.

-Sí, acá estoy- rodé los ojos mientras me cruzaba de brazos -¿Qué no pensaste en buscarme en mi curso? De seguro tienes extensiones en vez de neurona.

-Extensiones las tuyas mosquita muerta- se acercó a mi, con Milagros a su lado y un montón de miradas curiosas, provenientes de los aulas, los pasillos y la entrada.

-Ignoraré tus patéticos insultos- bufé impaciente.

-¿Patéticos insultos? Solo digo la verdad, eres una A-R-R-A-S-T-R-A-D-A- dijo con desprecio en su voz.

-Pruff- resoplé -He recibido peores ofensas de la abuela cristiana de mi vecino.

-Sos una puta quita-novios ¡Dale! ¡ADMÍTILO!- gritó con su irritante voz chillona.

-Dejá de gritar ¡No estamos sordos!- apareció Alexa y se colocó al lado mio -Ya pará con todo esto Megan, dos peleas en un día no te convienen- se cruzó de brazos.

-¡Me robas hasta mis amigas!- se quejó histérica.

-Ya andá al grano y decime ¿Para qué me buscabas?- esta mina me está sacando la poca paciencia que me queda.

-¡Scott cortó conmigo!- chilló al borde de "las lagrimas" -¡ES TU CULPA! ¡LO ENGATUSASTE Y ME DEJÓ PARA ACOSTARSE CONTIGO!- dijo como niña caprichosa.

¿Scott terminó con Megan? ¿Engatusar? ¿Quién usa ese verbo en Argentina? Una adicta a las novelas mexicanas capaz...

-La relación entre Scott y vos no tiene nada que ver conmigo. Además, te veías muy contenta con el rubio bronceado ese- contraataqué sin pensar.

-¿Me estuviste espiando?- rió cínica -Jonh era solo un pasatiempo, en cambio, Scott es solo MÍO- resaltó lo último.

-Bueeeeno- alargué alzando los pulgares -Me parece perfecto. Es todo tuyo, no hay problema- le guiñé un ojo -Ahora, si me dan permiso, me voy. Porque al ser "una perra" no aguanto a gatas- me di media vuelta y empecé a caminar, con mis amigas, hacia la clase que estaba por empezar.

-¡HIJA DE PUTA!- detuve mi paso de golpe y me di vuelta muy lentamente.

-¿Qué me dijiste?- dije asombresiendo mi mirada.

-¡Sos tan puta como era tu vieja!- sonrió contenta de hacerme enojar -Seguramente la mataron por eso- concluyó mirando sus uñas color rosa chicle.

¿Acaba de decir, lo que claramente acaba de decir?

"Definitivamente, lo dijo"

-No quisiste decir eso- apreté mis puños, me acerqué y me puse delante de ella -Te doy tiempo para pedir perdón.

-¿Sabes que creo que hizo antes de morir?-colocó su indice en su barbilla fingiendo pensar y dijo: -Tener sexo con un hombre casado como la puta que era- y esa fue la gota que colmó el vaso. Mejor dicho, la gota que colmó el gran tanque de agua que Megan había empezado a llenar desde jardín de infantes.

-Vas a desear haberte quedado callada- gruñí furiosa y me abalancé sobre ella, tirándola al piso.

Sin perder tiempo, me senté sobre su estomago y comencé a darle puñetazos por toda la cara. Ella me empezó a arañar en los brazos, pero no me impidió seguir pegandole y comencé a tirarle los pelos.
Todos los alumnos del instituto, o eso creo, nos empezaron a rodear en un gran circulo y mientras aplaudían, gritaban "¡Pelea! ¡Pelea! ¡Pelea!". Las chicas me empezaron a gritar que parara, pero no lo hice y no lo pensaba hacer.