Capítulo 3

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Es domingo por la noche y me estoy cambiando para ir a la carrera de la cual me habló Marcos. Él es mi mejor amigo, consejero en todo lo que yo necesite en especial si se trata de carreras.

Se volvió muy especial para mí, desde el día en que me apoyó en los momentos en los que mi madre había muerto. Además, cuando cumplí mis 15 años me presentó por primera vez el mundo de las carreras clandestinas.

Bueno echando las cursilerías a un lado mejor describo a mi conjunto: un top negro a tirantes, un jean corto de mezquilla, botas sin mucho tacón y mi querida chaqueta de cuero.

Cuando terminé de cambiarme me coloqué rimel, sombra de ojos color negro y un labial rojo mate que resaltaba mis labios. Peiné mi cabello dejándolo suelto.

Me observé en el espejo y sonreí satisfecha al ver el resultado increíble y simplemente perfecto: esa era yo.

Agarré mi mochila pequeña que contiene: mi arma, el permiso de esta, maquillaje, mi licencia de conducir, algunos billetes arrugados de por ahí y mi celular.

Sí, tengo un arma...pero solo la usaría si es extremadamente necesario.

Bajé las escaleras sacudiendo la llave de mi Harley Davidson negra, la cual compré con una parte de todo el dinero que nos manda mi padre. Pero esa historia se las contaré más tarde, ahora tengo una carrera que ganar.

-Alto ahí señorita- me frenó mi hermana cuando estaba a punto de abrir la puerta.

-Hola Anita...

-Vas a una carrera ¿No?- achinó los ojos con los brazos cruzados.

-Te prometo que voy con cuidado. Sabes que sé cuidarme muy bien sola- dije rápidamente.

-Ok pero solo con una condición- me señaló.

Agh, odio cuando dicen eso.

-¿Qué quieres?- resoplé.

-Mañana es tu primer día de clases, así que no quiero que llegues tarde y también quiero que mañana vayas a buscar a las niñas de...- no la dejé terminar y salí corriendo de allí.

-¡Bueno hermanita! ¡Chao! ¡Te quiero!- me despedí con la mano y corrí hacia la moto.

(...)

Después de media hora de viaje, llegué al lugar indicado. Se trata de un puente abandonado y en ruinas, cerca de un pequeño barrio libre de policías.

Estacioné la Harley delante del lugar, me bajé retirandome el casco, dejándolo después en el mainiubro del vehículo.

Al observar a mi alrededor visualicé que había mucha gente gritando, aplaudiendo y saltando alrededor de la calle que se ubicaba por debajo del puente, donde ya habían empezado a correr. No me preocupé porque Marcos ya me había dicho que los nuevos iban a empezar.

Caminé con paso seguro y con la cabeza bien en alto.

Dangerous beauty!- gritó alguien mientras me abrazaba de la cintura, asustandome.

-¡Marcos! ¡Pelotudo de mierda!- me dí la vuelta y le pegué en el estómago.

-Perdón perdón me olvidé que odiabas que te asusten y...Que te hagan cosquillas- señaló un moretón en su brazo derecho que le había provocado yo la semana pasada porque había hecho exactamente esa última acción.

El chico de ojos claros me agarró la mano y me llevó hasta donde estaban los nuevos. Estos habían terminado la carrera y estaban felicitando a los ganadores.

Habían dos nuevos grupos de novatos de los cuáles uno venía hoy y el otro el próximo fin de semana.

-¿Quién es ella?- miré una morena que estaba sonriendo tímidamente mientras la felicitaban por haber salido en primer lugar.

-Alexa Centineo, le dicen "La diabla"- susurró a mi lado.

Como se habrán dado cuenta acá todos los corredores tenemos un apodo, el cual te asignan según tu historial policial, tu personalidad o según tu pasado.

En mi caso, me bautizaron como "Dangerous beauty" porque desde el día en que llegué demostré mi insoportable carácter y mis habilidades con la defensa personal.

"Re humilde la piba ¿eh?"

En fin, me acerqué a la tal diabla y me fijé más en su aspecto. Mide al menos 1.70, su cabello es de color castaño claro, ojos celeste cielo, buen físico y viste ropa....¿Cómo lo digo...? sexy pero decente.

-Felicidades novata- fue lo que le dije mientras extendía mi mano.

-Gracias- sonriete recibió el apretón de manos -Vos debes de ser la famosa ganadora de que me contaron- nos alejamos un poco de la gente y le hice seña a Marcos para que nos dejara solas.

-Pues...Soy buena, sí.

-¿Te gustaría correr conmigo? Me encantaría ganarle a una leyenda- me desafió parando el paso y mirando a lo lejos a mi moto.

-Hum...creo que me daría pena humillar a una recién llegada- contraataqué riendo.

-Inténtalo, capaz y sales decepcionada- alzó una ceja cruzándose de brazos.

-Ok acepto tu reto- dicho eso mi voz de camionera sale a la luz -¡OIGAN!- les llamé la atención a todo el público y a los otros corredores -¡MI AMIGA "LA DIABLA" ME ACABA DE RETAR A UNA CARRERA! ¿QUÉ LES PARECE SI EMPIEZAN LAS APUESTAS?

Todos levantaron los brazos gritando eufóricos.

-¿Lista para comer tierra Dangerous?- me dijo mientras me alejaba para buscar la Harley.

"Creo que nos llevaremos bastante bien nosotras dos..."

¡Peligro! Nerd a la vista| Lola#1Donde viven las historias. Descúbrelo ahora