Sólo tú y yo

24

Lauren
Miami

Lo siguiente que vi y sentí, fue a ese hombre jalar el brazo de Camila y empujar mi hombro con fuerza. Me tambalee un par de pasos atrás. Algo sorprendida y con una ira creciendo dentro de mi.
Sujetó a Camila por las manos y la acercó hacia el.

-¿Que estás haciendo Camila? ¿Quién mierda es ella?
Escupía fuego por sus ojos. Camila se quejó e intentó safarse pero incluso la apretó más y yo estallé. Estaba totalmente equivocado si yo iba a permitir eso.

-Fredd cálmate y suéltame ¡Sueltame! Gritó desesperada y yo tomé todo el valor que creció dentro de mi. Nadie iba a lastimar a Camila frente a mi. Sonaba tan absurdo pero en ese instante me vi haciendo lo que jamás había hecho. Jamás había estado en una riña, jamás había golpeado a alguien en la cara con el puño, si lo hubiera sabido.
Mi mano latía con dolor y miré al tipo topar con el escritorio por la fuerza de mi golpe. Camila se aferró a mi brazo buscando que yo no hiciera más.

-Fredd ya basta, vete. Suplicó. El hombre sostuvo su mejilla herida. Enfadado y gruñendo.

-Vas a explicarme esto, voy a llamarte y aclararemos las cosas, en cuanto a ti.
Se atrevió a apuntarme. Mi enfado creció más. -Mas te vale mantenerte lejos, por que no sabes nada sobre mi.
Así como había llegado se fue. Golpeando un par de puertas al salir.
Yo sostuve mi mano herida y busqué a Camila.
Ella permanecía con la mirada al piso y una cara indescifrable.

-¿Que fue eso?
Me angustió mirarla tan quieta así que olvide mi mano y caminé para apoyarla por los hombros.
-¿Quien es el?
Ella parpadeó e intentó alejarse pero no lo permití.
-¿Te ha lastimado? Sujete sus mejillas. -¿Estas bien? Camila.
Sus ojos por fin se enfocaron en mi y me miró aterrada. Me dió la espalda y sujetó su cabeza.
-¿Camz?
Gruñí bajo al latir de mi puño, iba a inflamarse si no hacía algo. Ignorando su estado, caminé al lavabo para mojar mi piel irritada y magullada. Bien, me calmó no ver nada de sangre. ¿De dónde tome tanta fuerza? Había actuado sin pensármelo mucho.
¿En que me había metido?
Ella tenía novio ¿Quien mas podía ser?
Me giré enfadada y ella limpió una lágrima sobre su mejilla. Dió los pasos necesarios para estar de frente. Tomó mi mano asustada.

-Dios, Lauren, lo siento.

-¿Quien era?
Sus hombros se tensaron y luego fingió preocuparse por mi mano. Mierda. Estaba molestándome su silencio, solo quería saber quien era el tipo e irme de ahí.
-¿Camila? Dije entre dientes.

-Es mi exnovio, tenía mucho tiempo sin saber de el, ni siquiera entiendo por que vino a buscarme aquí.

-Parecía realmente sorprendido y enfadado al verme contigo ¿Segura que no es nada tuyo?

-Confía en mi, me he sorprendido tanto cómo el, no tenía idea de que quisiera buscarme. Dijo con inocencia. Mentía. Totalmente lo hacía y eso me enfado. Sin embargo solo me concentre en hacerle daño. Por eso estaba con ella, no iba a meterme en sus problemas con el tipo.
¿Así que quería jugar un poco con mi mente? Pues se equivocaba. Logré sacar mi papel más compasivo y tierno. Dejé de fruncir el ceño y actué preocupación. No iba a preguntarle más. Solo quería coger con ella y soltarle lo poco satisfactorio que imaginaba iba a ser. Si. Iba a alucinarla por completo y luego a largarme de una vez. No necesitaba este tipo de drama en mi vida.

-Esta bien. Pronuncie con esfuerzo. -¿No te ha lastimado? Pregunté con ternura y sobe su mejilla. Negó.

-Que pena Lauren, de verdad perdón por esa interrupción, no hablaré con el por supuesto, es un idiota si cree que puede venir a buscarme y reclamar por lo que vio, el y yo no tenemos nada, nada, te lo prometo.
Asentí inquieta y besé su frente.

-Si no quieres hablarlo esta bien, solo, si el aparece otra vez, le daré otro golpe.
Camila se apretó a mi pecho.

-No quiero que lo hagas, es...tenemos que ponerte hielo en la mano, ven.
Tomó mi mano sana y me dirigió hacia otra parte de la clínica. Miró por el espacio libre asegurándose que nadie mas estaba ahí. Entramos a una cocina pequeña y un comedor corto. Él área de descanso para muchos, supuse. Me sentó en una de las sillas y revisó el congelador de donde tomó una bolsa de hielo pequeña. Lo colocó sobre mi mano.
Se miraba preocupada.
-Lo siento, en serio.

-Puedo olvidar el incidente de verdad, confió en que tú arreglarás esa parte, respeto tu pasado Camz, sólo quiero que me digas la verdad ¿No están juntos? pregunté de nuevo.

-No. Respondió al mismo tiempo que yo terminé la pregunta.
Esperamos en silencio total.
Cuando mi mano comenzó a relajarse. Quite el hielo y me puse frente a ella.

-Sólo estoy enfadada por que interrumpió algo importante. La hice sonreír levemente.
-Tendremos que buscar otro lugar.
Soltó una risita.

-Sin duda.
Besé sus labios nuevamente y fingí olvidarme del incidente. No era ese mi objetivo. Logré sentarla en la mesa y besarla por otros largos minutos. La tenía ya.
Pensé en un lugar para estar solas.
No podría ser mi casa ni la de ella, ni la clínica.
Un hotel. Fue lo primero que vino a mi mente. Podría llevarla ahora mismo o mejorar la escena.
Llevarla a la casa, pedirle una cena y luego llevarla a un hotel.
Besé su mejilla.

-Quita esa cara Camz, puedes solucionarlo si aceptas una cita conmigo por la noche ¿Quieres?
Sonrió tiernamente y asintió para luego besarme.
Un paso más.