|One-shots Mirio Togata|

- Tritón -

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La Yūei es una academia donde sus estudiantes aprenden a tratar y proteger a los animales mágicos que viven entre ellos. Parece ser que el tritón de la escuela tiene los ojos fijos en alguien...

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(Tn) se encontraba en su clase tomando apuntes de los llamados "híbridos dragones". Una mezcla entre dragones y humanos que se realizó hace millones de años atrás.

La clase era tranquila, hasta que entró de golpe una persona llamando la atención de todos.

Nighteye, con una mirada de muerte, interrumpió la clase de Aizawa. Se movió entre las mesas y se plantó delante de una de ellas: la de (Tn).

Golpeó sus manos en la mesa y la miró directamente a los ojos, asustando aún más a la chica, que cada vez se apoyaba más en el respaldo de la silla.

-Te avisé, te dije que como volviera a pillarte caminando por allí tendría consecuencias.

Tragando con fuerza, contestó:

-Disculpe Sir Nigtheye, pero yo no he ido esta vez. Desde que me lo dijo no he caminado por allí.

La clase se quedó en silencio, el hombre se incorporó moviendo sus gafas.

-Creeme, da igual lo que digas. Tengo pruebas de que has estado allí.

-Sir Nigtheye,-llamó Aizawa,-no sé que habrá hecho (Tn), pero a mi me gustaría continuar con mi clase.

-Lamento la interrupción, si no te importa, me la llevo al despacho del director.

Aizawa asintió y (Tn) tuvo que ir con Nigtheye al despacho.

X

-¿A qué se debe esta visita?-cuestionó Nedzu con su habitual sonrisa, mirando a los dos que se sentaban delante de él.

-(Tn) ha vuelto a entrar en el acuario sin permiso-respondió Sir Nigtheye.

-Mmm, ¿de nuevo (Tn)?

La chica bajo la cabeza un poco, arrepentida por ser atrapada. No paraba de preguntarse como la habían descubierto, ¡se había tomado todas las precauciones posibles!

-¿Qué haremos contigo?-preguntó Nedzu sorbiendo su té.-¿Tienes alguna idea Sir Nigtheye?

-La verdad es que sí. Viendo que le gusta mucho pasarse por el acuario, propongo que trabaje allí después de clase.

El rostro de (Tn) se levantó sorprendida. No se esperaba aquello. Esperaba una expulsión inmediata, sobretodo si se tenía en cuenta que Sir Nigtheye lo había hecho antes por mucho menos de lo hacía la chica.

No era un secreto que el hombre le tenía mucho cariño y respeto a las criaturas que vivían en el acuario. Por lo tanto, traspasar las reglas establecidas significaba un billete de ida más que seguro.

-Me parece razonable-afirmó Nedzu asintiendo con la cabeza antes de dirigirse a su estudiante.-Teniendo en cuenta que aún no tienes pasantía, la harás en la escuela trabajando cada día después de clase. Esto también contará como experiencia laboral, así que será bien visto para las empresas en el futuro. Solo que nosotros no te pagaremos, al menos hasta dentro de un mes. Y esto es por todas las veces que has entrado sin consentimiento.

-Sí, señor-respondió (Tn).

-Puedes volver a clase, pero luego te quiero ver en la zona del acuario-ordenó Sir Nigtheye.-Y con ropa que puedas mojar. ¿Entendido?