Tu encajas perfectamente en mis solitarios brazos.

Capítulo 4: Nada más hermoso que tu sonrisa.

Su mañana comienza con un mensaje de texto de Daichi, así que comienza intrínsecamente bien. Entonces Suga entrecierra los ojos ante la horrible luz de su teléfono y lee el nombre y... ugh. Oikawa estaba ahí, otra vez.

De: el príncipe encantador de suga ~, 5.23 a.m.

Mucho hielo afuera. ¡Cuídate!

Dividida entre la burla y la sensación de calor porque Daichi le había enviado un mensaje antes de irse a su carrera matutina antes del trabajo (ese tipo demente), Suga se conforma con cambiar el nombre de Daichi a un Daichi simple y prepararse un café antes de contar con mensajes de texto de vuelta.

Para: Daichi, 8,03 a.m.

igualmente. El hielo es el enemigo. No dejes que te atrape

Él toma un sorbo de su café antes de que Buttercup maúlla en voz alta en el alféizar de la cocina, el tipo más rudo de maullido, y lo mira a los ojos mientras ella acaricia la maceta nueva que está allí. Suga pasa la mañana maldiciendo y barriendo los miserables restos de la última víctima en una larga hilera de incidentes trágicos, mientras Buttercup mastica su fresco plato de comida para gatos (el plato rosa que Oikawa la compró) y Princess es su brillante faro de esperanza mientras ella empuja su mano con su nariz como una disculpa en nombre del niño problemático.

Toma una foto de los lamentables restos que quedan en el recogedor y se los envía a Daichi.

(Por eso debes apreciar tu oportunidad de cultivar plantas.)

Han empezado a meterse en esta rutina. La tarjeta de memoria de Daichi está llena de imágenes de gatos, plantas y una imagen del impactante armario vacío de Suga que actualmente solo tiene tres (3) de las tazas originales, mucho más grandes.

A cambio, Suga obtiene imágenes de las puestas de sol que ve Daichi, porque es una persona ridícula que puede funcionar en la mañana, incluso sin tomar un café, y Suga nunca verá un amanecer cuando tiene la opción de dormir. Sin embargo, despertar con las fotos de ellos. Él puede apreciar eso.

También hay algunas imágenes de árboles, "para el amante de las plantas", y una imagen que sin duda ha sido el punto culminante de todo esto, porque Daichi mostró los restos de marcador en su brazo y Suga pudo haberlo encontrado ese brazo muy, muy, muy atractivo.

¿Cómo podrían un antebrazo y una mano abierta ser tan sexy? La ciencia tiene cero explicaciones. Tal vez fueron las mangas enrolladas, son la debilidad de todos. El resto es probablemente una cosa de Daichi. La parte mala es que sus brazos se ven exactamente tan fuertes como su voz sugiere que podría ser, y Suga encontró una prueba más real de su teoría de "podrías llegar a sentirte muy seguro en sus brazos". ¿Cómo se supone que no reaccione a eso?

Él podría tener algún fetiche por los brazos. Pero solo en este caso. Él podría tener algo realmente importante para Daichi en general. Maldita sea.

Más tarde, Daichi le envía una foto de una impresora que ha estado actuando raro, diciendo que podría llevarse bien con el horno de Suga.

El día es tranquilo y pacífico.

Eso es hasta que Suga regresa a casa del trabajo para ver a Oikawa tendido sobre su sofá, Buttercup ronroneando en su pecho como un angelito mientras cambia perezosamente a través de los canales sin prestar mucha atención a lo que sucede. Suga frunce las cejas. Eso es extraño, incluso para él. ¿Por qué demonios pasaría la mitad de su día aquí? Eso es lo que parece, al menos, a juzgar por los envoltorios de dulces tendidos alrededor de él.

"Oye, ¿sucedió algo?"

Oikawa se vuelve hacia él, con esa sonrisa que pretende ocultar todo lo que pueda sentir, y no hace más que confirmar las sospechas de Suga de que algo está sucediendo.