Serena un despetar y un nuevo amor

#14: ¿Transformación?

Serena dormía plácidamente, sus sueños solían ser calmados, pero en esta ocasión fue diferente. Se encontraba en un lugar distinto, era antiguo y le resultaba melancólico, el polvo del lugar y la luz tenue le costó distinguir que era su antiguo hogar.
En medio de toda la destrucción pudo divisar una figura conocida, se acercó con cautela, era su madre.

Serena -se acercó sin creerlo, no había soñado con su madre desde hace mucho-; ¿Mamá?

Serenity -sonrió calidamente, abrazo a su hija-; Hola Serena, ¿Cómo has estado?

Serena -la abrazo con fuerza, no pudo evitar llorar-; No sabes cuanta falta me haces mamá.

Serenity -asintió acariciando el cabello de su hija, también estaba feliz por el encuentro-; Mi niña, estoy aquí para hablar de algo importante acerca de tu futuro y ese hombre.

Serena -oculto su rostro en el pecho de su madre-; Dime mamá.

Serenity -sonrió-; Sabes que ustedes dos tienen tiempos de vida diferentes, tú eres una lunarian y el un humano. No quiero verte sufrir por su muerte.

Serena -sabía acerca del tema, ya lo había pensado un par de veces-; Lo se, pero no se que hacer.

Serenity -mostró un trozo de estrella naranja-; La única manera es que se convierta en un sailor del sol..

Serena -se confundió-; ¡¿Cómo puedo hacer eso!?

Serenity -le entregó el trozo-; En algún momento serás capaz de hacerlo, tienes el poder de hacerlo, pero solo cuando sea de buena accion.

Serenity le sonrió a Serena, permanecieron abrazadas hasta que la Reina lentamente se desvaneció.
Serena desperto de inmediato, le faltaba el aire y estaba temblando, esto despertó a su compañero que trato de calmarla.

Sai -la abrazo con fuerza-; Oye, oye calma. ¿Qué tienes?

Serena -al mirarlo rompió en llanto, sintió un mal presagio por el sueño-; No quiero que mueras, no quiero...pero debes convertirte en un sailor como yo.

Sai -le sonrió y la consolaba-; Lo haré, pero no te entiendo del todo. ¿Morir?, yo jamás moriré, vencere a la eternidad si es necesario.

Serena -le dio el trozo naranja-; Entonces conviértete en un sailor, así estamos siempre juntos y podrás defenderte.

Sai -asintió mirando el cristal-; Está bien, por ahora vuelve a dormir.

Sai recostó a Serena, tardó una hora en volver a dormir ambos.
Encontraron la calma antes de la tormenta, aun que en la mañana pagaron el precio por no dormir lo suficiente y Serena volvió a faltar a la escuela.

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ATTE: RINNI HIGURASHI.