O C H O

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Noah había llegado a la cocina. Sus ojos se mantenían cerrados, y gracias a eso, todavía pensaba que realmente había un fantasma.

Finn: ¿Noah, qué haces?

El mayor rió ante tal escena; Noah agarrándose de donde podía para no caerse, ya que sus ojos se mantenían cerrados.
El menor sólo dio un pequeño brinco en su lugar, por el susto, y eso ayudó a que el niño cayera al suelo, dándose todo su hermoso trasero contra la fría losa.

Noah: Maldita sea, Finn.

Finn: ¿Disculpa? —un tono de enojo se escucho en sus palabras, aunque era totalmente falso, sólo quería jugar con pequeño.

Noah: Lo...lo siento, quise decir Daddy.

El más alto se acercó a donde el castaño estaba y lo ayudó a levantarse.

Finn: Noah, eres hermoso —espetó a medida que apegaba al menor a su cuerpo.

Noah: Gracias, Daddy. De igual manera, tú no te quedas atrás, eh.

Finn: Ah, ¿Si?

Noah: Sí...si —el menor rió nervioso.

Finn: Noah.

Noah: ¿Sí, Daddy?

Finn: ¿Cuándo fue la última vez que viste porno?

Noah: Oh no, yo no veo esas cosas. Pienso que el mercado del porno es totalmente machista. Y ya sabes, va encontra mis ideales.

Finn: Ya veo...y me parece perfecto.

Noah: Lo sé —insinuó mientras guiñaba su ojo izquierdo de manera coqueta.

Finn: Te ves taaan tierno cuando te quieres hacer el coqueto... —dijo alargando la palabra "Tan".

Noah: Oye, no sabes que puedo llegar a ser cuando estoy en modo sexi...

Finn: Quiero saberlo ya mismo.

El calor comenzó a subir a las mejillas del castaño, no esperaba que Wolfhard se tome todo tan en serio.

Noah: ¿A-Ahora?

Finn: Sí. Pero está bien si no quieres, bebé, todavía eres un niño para esas cosas, ya sabes...

¿Acaso Finn le estaba diciendo niñito a Noah? Realmente no, pero el menor si lo interpretó así.

Noah: Oh, claro que puedo ser sexi, Daddy.

El adolescente agarró a su Daddy de la mano para así llevarlo hasta el sofá de la sala, y sentarlo.

Finn: Hey, bebé, no tienes que hacerlo. De verdad todavía eres algo niño para esto y...

Al oji-miel le hervía la sangre. Odiaba que su Daddy pensará que él todavía era un pequeño e inocente bebé, aunque a veces si lo era.

Noah: Tú sólo espera aquí, Daddy.

Finn: Bueno, pequeño.

El menor se dirigió a una de las habitaciones, más específicamente, en la cual estaba el disfraz de conejito.
El niño se quitó su short rosa, el cual combinaba con su remera lila, y se colocó el 'disfraz'.
Noah llegó a la sala, pero antes de entrar por completo, y ya que su Daddy no podía verlo, aprovechó para pedirle a Finn que cerrara los ojos.

Noah: Daddy, cierra los ojos...

Finn: Noah...

Noah: Por favor...

...

Perdón, está re corto, pero realmente quiero hacer un buen smut, y lo voy a dejar para el siguiente capítulo.
Love u <3

daddy'ѕ вaвyвoy  [en edιcιon]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora