Hoseok odia que su padre espante a todos sus pretendientes, odia que no le deje pasar tiempo con sus amigos, odia que lo tenga encerrado en una jaula.
Así nunca va a follar con nadie y lo sabe, morir virgen para nada esta en sus planes.
Que el hombr...
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Mamá murió cuando yo nací, por lo que sólo me enteré de su apariencia y forma de ser por las fotos que había en la casa y los relatos de mi hermana mayor, papá tampoco hablaba mucho de ella, suena bastante cliché lo sé pero eso fue lo que determinó a papá para ser todo un loco por la seguridad.
Cero permisos, cero nada.
Miré a mi hermana que no dejaba de arreglarse frente al espejo, ella se veía preciosa con un vestido corto, plateado y brilloso por todos lados.
—Papá va a matarte si se entera— le advertí, pero ella me ignoró como siempre, pintó sus labios con un labial rojo brillante y sonrió al espejo.
—¿Me veo bien? — me preguntó y volví a asentir como todas las veces anteriores que me había preguntado —entonces me voy— dijo, tomó su bolso donde guardo sus zapatos de tacón, su labial y una loción.
La vi caminar hasta la ventana y abrirla.
—Tienes que estar en la mañana antes de las ocho aquí acostada o papá se dará cuenta.
Ella asintió con una sonrisa, corrió y se subió a mi cama, sin que lo esperara me dio un beso en la frente a pesar de que yo odiaba que fuera muy melosa conmigo.
—Te amo hermanito— dijo pellizcando mis mejillas —con todo mi corazón.
La besé en la mejilla de regreso porque lo sentí necesario —cuídate hermana fea y tonta— le dije, asintió con una sonrisa y desapareció por la ventana después de decirme que eran un "bobito".
Yo rendido de sueño apagué la luz y me acosté a dormir.
Mi hermana no regresó antes de las ocho como le había pedido.
No regresó nunca.
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