Natsu Dragneel-Kun

Capítulo 14

Gracias a que el sol, daba sus indicios de ocultarse en el poniente, reflejaba un color anaranjado rojizo dando un hermoso paraíso y más en la playa, que por cierto, nuestro pelirosa se encontraba corriendo a más no poder ya que se alejó bastante de caminata que dio junto a Dimaria, en su rostro se reflejaba el cansancio y el miedo, ¿el porque?, simple, no quería toparse ni mucho menos tener que ver enojadas a una albina de cabello largo, una pelinegra y una pelirroja que son bastantes celosas y posesivas...

Corriendo por menos de cinco minutos, por fin llegó a su destino, recuperando el aliento perdido, se armó de valor para entrar al hotel, al pasar por las para no encontrarse con nadie en la recepción, cosa que lo alivió bastante, pero también le pareció raro no encontrarse con la recepcionista, así que procedió a encaminarse hacía las habitaciones, y detenerse en la suya que compartía con las chicas. De la nada, le llegó un escalofrío de terror, y sintió que dentro de la habitación se sentía una horrible presencia de muerte, tragó saliva, y con su mano temblorosa decidió deslizar la puerta del cuarto, encontrándose, no solo con las que más temía, sino también con las demás chicas, que se encontraban sentadas en el suelo, de piernas cruzadas al igual que sus brazos, con una mirada que reflejaba enojo puro...

-H-Hola...chicas- saludó con temor, una sonrisa nerviosa y sudor frío, las chicas solo respondieron afilando más su mirada, cosa que espanto aun más a Natsu

-Natsu, por favor, siéntate- habló de forma sería pero también con un tono del diablo la pelinegra Seilah, y como si fuera un velocista, ya se encontraba enfrente de las chicas de la misma manera que las chicas, excepto que tenía sus brazos en los costados, y su espalda recta- Bien, ahora, para evitar que haya algún inconveniente o algún malentendido...- Seilah no pudo terminar de explicar ya que fue interrumpida por Erza quien se lanzó encima de Natsu, quedando encima de él peri enterrando un cuchillo enterrándolo a un costado de su cabeza ocasionando que el pelirosa sintiera más que el verdadero terror...

-¡¿Por que carajos tardaste tanto Natsu Dragneel!?- gritó con mucho enojo y un tono de voz del diablo, su flequillo tapada su ojo derecho, Natsu como podía, trataba de mantener la compostura y no temblar de miedo, cosa que ya hacia- Responde - Por un instante el tono de voz de la pelirroja cambio a uno escalofriante y posiblemente oscuro, asustando aun más de lo que ya estaba Natsu, el pelirosa se quedo callado por unos cuantos segundos y ante de que Erza volviera hablar con ese tono de voz, Mirajane hablo

-Tranquila Erza, todas nosotras merecemos una explicación del porque llego a esta hora y no lo niego, también estoy furiosa, pero trato de mantener mi compostura- la voz de la albina se escuchaba tranquila y serena, pero eso para el pelirosa era mala señal, en cuanto a la pelirroja escarlata solo pudo soltar un suspiro, dejar el mango del cuchillo, quitarse de encima del pelirosa, para volver a sentarse en su lugar- ahora ya que todas estamos tranquilas. Natsu, queremos saber porque llegaste tan tarde

El pelirosa por obvias razones, ya estaba sentado y meditando si en verdad debía decirles la verdad, conociéndolas, de seguro lo torturarían o algo mucho peor, le quitarían su masculinidad...

Así que, con todo el valor reunido, inhalo profundo para hablar con algo de temor...

-¡EstuvecaminandoyplaticandoporunbuenratoconDimaria!- No por hablar en voz alta de manera bastante rápida, las chicas no pudieran entenderlo, ya que al terminar de "platicar" el pelirosa, tomaron una expresión de sorpresa y enojo, el silencio abundo la habitación al igual que la tensión...

-¿Solo...platicaron...?-pregunto  con duda pero a la vez con enojo apretando su mandíbula la rubia con la mirada baja y su rostro ensombrecido

-Si...solo platicamos, no paso nada más- hablo más tranquilo el pelirosa viendo pasando su vista en todas las chicas que parecía que iban a explotar de ira en cualquier momento- Chicas, se lo prometo, no paso nada entre Dimaria y yo- trato de calmar a las chicas usando su tono de voz tranquilo y sereno, cosa que les saco un pequeño sonrojo a las chicas, al ver que todas ya estaban un poco más calmadas, se levanto del suelo- Bueno chicas, voy a terminar de ensayar con los muchachos, puede que nos quede todavía un mes y medio, pero toma bastante tiempo practicar la canción, nos vemos en la mañana chicas- dijo por último despidiéndose de las chicas, saliendo de la habitación soltando un suspiro, a el no le gustaba mentir, y mucho menos si se trataba de sus "amigas", pero si quería seguir viviendo, no tenía opción...