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Nos invitaron a la exposición de arte que había organizado el grupo de tercer semestre en la materia de artes plásticas. Si bien, todos se esforzaron e hicieron un grandioso trabajo. 

Miré cada cuadro y cada escultura que habían hecho. Cada uno tenía el nombre del autor y su firma. Me sorprendí de inmediato cuando vi el nombre de aquel chico en uno de los cuadros. Su creatividad era con un poco de humor. Sonreí y me quedé ahí, asimilando cada detalle plasmado en él.

Cuando salí de aquel salón, en el camino de regreso me encontré con él. Pasé a su lado, pues estaba sentado en una jardinera junto a dos chicas más. Alcancé a escuchar su voz, al parecer les estaba enseñando algunas palabras en ¿Italiano? O algún otro idioma que yo no entendía.

No sé si fue mi imaginación que me confunde o en verdad cuando pasé a su lado me miró. Y si fue así, ¡bienvenido a mi corazón! 

El jardín de mi mente ©  [✔]Waar verhalen tot leven komen. Ontdek het nu