¿ Por Qué Nací Pobre ?

Capítulo 2

Mientras pasaban los días no recibía cartas sobre mi padre , no me gustaba los cambios que mi madre iba haciendo , ella actuaba muy raro ya no era la mujer de los bellos rizos y vestidos hermosos , se vestía muy provocativa << ¿Tan despechada podria estar una mujer?>> , yo estaba preocupada por mi padre , lo extraño era que mi madre de a poco iba vendiendo las prendas de mi padre o solamente las tiraba , yo no comprendia el porque de las cosas , no me gustaba sus actitudes e incluso me trataba mal. Luego de un tiempo largo sin saber noticias de mi padre y aun previsto el tema de la 2da Guerra Mundial mi madre conoció a un hombre no parecía un aleman si no un simple vago , según ella ese hombre la hacía sentir como alguien que nunca logró mi padre , los días eran eternos y peor aun cuando ese hombre desconocido se albergaba en nuestra casa , a mi madre ya no le importaba si comiamos o no ella solo pensaba en el alcohol y en lo que su nuevo novio o lo que fuese .

Nos encontrábamos viajando por una carretera viajando sobre un Krupp-Protze básicamente era un camión como los de artillería el que lo conducía era el nuevo esposo de mi madre  , ya había pasado un seis sin saber nada de mi padre y jamas habia leido su sobre tan particular y con su firma , sentía esa necesidad de leerla cuando él volviera y me abrazara . Ahora mismo me encuentro en posición fetal sin saber hacia dónde vamos  , lusco un vestido azul marino con un moño negro entre mis rizos dorados , el camión se mueve mucho como si se fuese a volcar cuando de repente siento discusión .

- Isabella me tienes cansado con tus quejas!-. Yo no podía ver hacia el sector del que maneja y su acompañante solo podía mirar la noche oscura que me rodeaba.  

- Tú me tienes cansada con tu maldito alcohol -.La voz de mi madre estaba corrompida , aun no comprendo porque se quedó con ese hombre si era un egoista , un bueno para nada , no trabajaba y a causa de que el es judio huimos de polonia , mi madre no toleraba a los judíos pero ahora es muy amiga de ellos y sale con uno de ellos.- Basta Carl para el camión- ; Ella replica enfurecida .

- Vamos linda estamos a punto de llegar no te enojes- ; Dice él con voz ronca , aun me encuentro de la misma posición , sacó un libro muy antiguo y un diario eran objetos que le pertenecían a mi padre y allí dentro estaba su sobre que jamás lo quise abrir - ; Se siente un llanto espeluznante, era el de mi madre .

-¿Por qué debimos vender la casa? ¿ Por qué te segui con todo esto ? -; Ella sonaba indignada , se siente un portazo enorme del Krupp-Protze y de nuevo se pone en marcha . Luego de eso el viaje fue silencioso hasta que escucho la voz de mi madre decir. << Cuando lleguemos quiero contarte algo >> , no escuches respuestas salientes de Carl . Pero decidí no preocuparme , me levanto y reviso el equipaje para sacar una manta o algo que me abrigue sentia mucho frio , mi vida estaba siendo miserable , convivia con el hambre y sobre todo con una pobreza terrible que sobrepasaba los límites de un mendigo , lo que comía antes de llegar a casa era lo que le trabajaba a mi vecina , solo le limpiaba algo todos los días por un plato de sopa caliente porque en mi casa solo había alcohol y habanos , para mi madre solo estaba ausente y jamas me decía si mi padre escribió o jamas me dio respuestas sobre el .  Cuando frena el  Krupp-Protze nos encontramos en un campo enorme básicamente una granja ubicada en Lituania , mi madre estaba abrazada a Carl y solamente me ordenaba a que bajara mi equipaje , era una casa muy antigua , de dos pisos y atras habia una huerta con hermosos frutos rojos , cuando ingresamos a la casa había un aroma a viejo , a polvo acumulado hacía años - Me froto los ojos de cansancio - y me dispongo a recorrer la casa , las paredes contaban con un antiguo papel dorado en algunas partes estaban manchadas de humedad , había cuadros muy antiguos , el piso era de madera con mucho polvo , los muebles estaban cubiertos con mantas blancas , la casa contaba con cuatro habitaciones para los habitantes , yo había elegido la última habitación ubicada al final del pasillo del primer piso , al ingresar veo una cama de hierro pintada de blanco con una manta blanca , la habitación era de color blanca con un armario enorme , a la derecha de ese armario había un espejo  con marco dorado y un mueble blanco con flores rosas pintadas , podría asegurar que alguna joven durmió aquí y al lado de la cama había una pequeña mesita de luz con un oso lleno de polvo -Lo zamarreó- para quitarle el polvo y me dirijo hacia la ventana para abrirla aunque la noche estaba oscura y fría; Luego escuchó otra discusión -.

-No podemos tener ese bebé Isabella-.

-¿Tenemos suficiente dinero para el alcohol , pero no para un bebé? -. Gritaba mi madre muy desconcertada , no me limite a bajar , pero ahora comprendí de lo que quería hablar con el maldito Judío de Carl . Mientras la discusión seguía me quito mi vestido azul y me pongo uno rosa claro para dormir , de mi valija sacó una foto mía junto a mi padre la colocó en la mesita de luz  y me hago preguntas

* ¿Y si estuvieras aquí ? , ¿Por qué me dejaste? , ¿Cuando volveras?*- Me hundo los ojos con lágrimas , me acuesto abrazando la almohada con aroma a viejo y miró nuestra foto << No dejo de extrañarte>> Replicó mientras lloro desconsoladamente , mientras en la planta baja suenan ruidos de cosas que se tiran y las discusiones , a veces me da miedo seguir conviviendo con mi madre , pero ahora espera un bebé y no puedo dejarla sola  , aunque ella ni siquiera se fija en mi existencia. Me resfriego los ojos tomo la foto de mi padre la besó y la abrazo hasta quedarme en un rotundo sueño.

Cuando me despierto veo el reflejo del sol por la ventana , me hundo más sobre el mullido colchón de plumas me limito a levantar la mirada hacia el techo de madera y veo una pequeña rotura , me levanto de un brinco y reviso mi maleta para sacar el diario de mi padre para leer sus aventuras dentro del ejército y cosas que escribía sobre mi madre , luego encontré en la página 45 una nota que decía-;

Fecha: 18/08/1940 

Querida Isabella :

Los días transcurren lentos , desde la última vez que te vi no he podido olvidar las curvas de tu sonrisa , tu vestido azul marino y tus hermosos rizos , es complicado no poder verte los entrenamientos son cada vez más duros y complejos a veces sueño que puedo tocarte y que en cada partida para nadar o hacer cualquier actividad te pienso siempre ; Pienso que eres ese general que me recompensará con un beso al llegar , amo el mirar de tus ojos e incluso con el brillo que me miras , amo saber que al regresar estarás en nuestra casa preparando una deliciosa cena y que tendremos uno lindo bebé , simplemente eres toda para mi .

Con Amor de tu querido Soldado... Herman.Johan. Scheider!!.

No sabía lo mucho que mi padre amaba a mi madre , aun no comprendo porque no volvió y nos dejó , a veces pienso en ese amor tan rotundo que tenían y en la forma en la que se amaban o me llevaban a pasear , me limito a levantarme y guardar el diario y caminó directo a buscar mi vestido azul me lo pongo y doy unas vueltas como una bailarina . Bajando por las escaleras que me delatan rápidamente siento un aroma a huevos de campo con orégano y estupefacto aroma a café -¡ Helena ya esta el desayuno , ven cariño! - ; No lo puedo creer mi madre no me preparaba el desayuno desde que tengo ocho años .

-Hola mamá-. Sonrió al verla con un vestido verde claro y un pañuelo del color similar en su cabello , tenía los labios rojos y unas sandalias muy bonitas .

-Carl ya desayuno - . Se limita a decir.

-Está bien mamá , ¿Te ayudo con esto?-. Le digo mientras agarro la fuente con arándanos.

-Si querida , quería hablar contigo, se que últimamente no hablamos mucho y me lamento por todo tratare de ser una mejor madre e incluso por el bebé que viene en camino. Me mira enternecida -. No deduzco sus buenos tratos porque supongo que algo busca conseguir . Simplemente asiento con una sonrisa dolorosa .

-Entiendo mamá , y sabes algo de papá. Me limito a decirle con la mirada baja hacias los huevos bien amarillos en mi plato.

-No, y no quiero que tengamos más relación con ese hombre que nos dejó. - El está muerto-. Me dice levantando su voz y de forma ronca .

- ¿Cómo lo sabes ?- Me encojo de hombros de repente siento un nudo en mi garganta que no me deja digerir el sabroso huevo amarillento .

-Porque simplemente lo es Helena , y ahora come tu desayuno-. Me lo impone muy nerviosa.

-No gracias , ya no tengo hambre -; Me levanto de la mesa y me dirijo hacia la puerta que me lleva al patio delantero de la vieja casa , cuando abro la puerta me lo choco a Carl que me dice - Hola nena, ¿ya desayunaste?- Pero en silencio me marcho . Yo sigo pensando que mi padre está vivo y que es raro que no me escribiera . Simplemente siento que él no me dejo y que espero con ansias que vuelva para abrir ese sobre que él tanto me regalo.