"Klass" [PhillxMason]

☆Capítulo IX☆

(Narro io)
—¿Desde cuándo su hermano juega?— Preguntó curioso el castaño, pero ninguno de los gemelos le respondió, ambos seguían mirando sorprendidos al mayor quien se mantenía de pie acomodando a los nuevos para que iniciasen los pases básicos del entrenamiento.

Antes de siquiera poder o comentar algo, Will se levantó de su lugar corriendo al campo de juego.

El rubio se levantó segundos después tratando de detenerlo, pero fue muy tarde ya que este estaba encarando a Phill quien mantenía su rostro neutro.

Como a Mason ese le parecía un problema familiar, tomó sus cosas y se dirigió a los baños.

(...)
Mientras se lavaba, múltiples ideas llegaron a su mente:

"Los Cipher son una familia muy rara, pero no creo que sean malos..."

Mientras pensaba en otras cosas, escuchó como es que la puerta del baño se abrió.

Como a Mason realmente no le interesaba nada, siguió con lo suyo, pero aquel que apenas había entrado tomo por los hombros al menor, dejándolo frente a frente.

—¡¿Qué demo-...— Gritó el castaño pero la mano de Gideon tapó su boca.

—¡Pero miren a quien tenemos aquí!— Dijo con una gran sonrisa. —¡Es el chico que esta en boca de todos el día de hoy!— El gran cuerpo del peli-blanco era demasiado pesado para por lo menos lograr moverlo, sin embargo el forcejeo solo hacía que Mason se agotara más. —Sabes, no soy una persona que se moleste por cualquier cosa, pero la verdad es que me enfurece que se metan con lo mío.— Su tono de voz se volvió mas grueso y su agarré mas fuerte.

—No es bueno que hagas esto en un lugar público.— Una voz proveniente de la puerta logro que el mayor soltara su agarré.

Mason se giró para poder ver al pelirrojo con un rostro sereno.

Gideon miró al castaño, para después girarse con su amigo. —Solo te dije que cuidaras la puerta.— Renegó el peli-blanco antes de pasar de lado de Phill saliendo y dejando al otro confundido.

El Cipher suspiró profundo y se acercó a Mason. —Lamento que el te traté de esa manera.— Tomó un pañuelo de su pantalón y se lo acercó, pero el castaño golpeó su mano lanzándolo lejos.

—¿Por qué me ayudas?— Preguntó con cierto tono de molestia.
Sin haber cambiado su rostro, el pelirrojo camino hasta donde estaba su pañuelo hincándose para tomarlo.
—¡¿Es por tu madre?!— Preguntó aún molesto el menor, sin recibir respuesta continuo. —¡Si es por ella déjame decirte que no de-...!—

—¡No es eso!— Grito interrumpiéndolo, era la primera vez que el mayor se salía de sus cabales o que levantaba la voz frente a él. Suspiro mientras se levantaba. —No lo entenderías.—

Recogió el pañuelo, acercándolo de nuevo al chico. Este miro la mano del mayor y después dirigió su vista a los ojos bermejo de Phill, sinceramente no parecía que estuviese enojado o algo parecido, pero un ligero todo de preocupación era perceptible.

Tomo aquella muestra de afecto que le estaba ofreciendo el más alto.
—G-Gracias...— Dijo mientras mantenía la vista baja.

Sin decir nada, el Cipher salió del baño, dejando solo al menor, este volteo al espejo mientras se recargaba en el lavamanos. —"No lo entenderías"...— Repitió.

(Narra Mason)
Caminé hasta la clase de biología, no prestaba atención a mi alrededor, estaba desconcertado por la actitud de Phill mientras estábamos en el baño.

Me parecía increíble como es que podía transmitir tantas emociones con aquellos rubíes que sin duda alguna me hacían sentir de tantas maneras.

Todo ese halo de interés se vio desvanecido cuando el recuerdo de Gleeful llego de golpe a mi mente.

Algo me decía que era un idiota, pero eso no justificaría un comportamiento así, digo; el acorralar a un chico en un lugar sólo es una invitación a pelear.

Claro que quiero hacerlo, pero hay una gran cantidad de malas cosas que podrían salir de eso.

Llegué al aula, y trate de olvidar todo lo que me había pasado, para poder concentrarme en mis clases, puede que siempre haya sido un busca pleitos, pero había decidido cambiar de vida y mantener mis calificaciones era el primer paso.

Entre con la vista gacha, tratando de buscar a alguno de los Cipher, pero ninguna de sus cabelleras distinguidas fue visible, aunque la sonrisa brillante de Roobie me invito a sentarme a un lado de él.

—Wow, tenía rato que no te miraba viejo.— Me dijo al verme llegar.

—Digo lo mismo.— Dije mientras buscaba cosas en mi mochila, pero algo había caído al tomar mi cuaderno.

Por reflejo, intercambie miradas con Roobie, quien al parecer no había notado aquello.

Me agache, y con cuidado tome aquella cosa, que no era mas que un papel con un recado:

"Por tu seguridad aléjate de Wendy N."

No se tenía que ser un genio para saber quien había hecho ese mensaje.

Lo arrugue entre mis manos y lo metí en el bolsillo de mi sudadera, la profesora llegó y me dedique solo a la clase, o lo intente debido a la amarga sorpresa que me había encontrado.

(Narro io)
Las clases ya habían acabado para Mason, quien iba de camino a la salida, pero el llamado de un chico logro detenerlo.

—¿A dónde vas?— Preguntó Will mientras se acomodaba la mochila en el hombro.

El castaño levanto los hombro. —Parece ser que este día saldré temprano, así que iré a la casa a ayudar a mi tío con algo.— Dijo sin rodeos.

—Oh...— El peli-azul bajo la vista. —Pues, mis hermanos estarán ocupados en la tarde así que estaré sólo, por sí q-quieres ir a mi casa un r-rato...— Se notaba un poco nervioso, pero esa propuesta logró que hasta cierto punto al otro le pareciera gracioso.

—Sabes, creo que el anciano no sabe cuál es mi horario así que no hay ningún problema en que me escape un rato.— Sonrió, gesto que replicó el Cipher. —Por cierto, ¿Qué harán tus hermanos?— Preguntó para iniciar una conversación.

El mayor suspiro. —Bill esta en detención...—

—¿En él primer día?— Interrumpió.

—Pues digamos que el tiene una fama algo reconocida por meterse en problemas junto a sus amigos.— Llevó la mano a su nuca. —Lo mas probable es que lo veas luego en acción.—Rió por lo bajo.

—¿Y que hay de Phill?— Interrogó de nuevo.

—Bueno... El simplemente se quedó en el entrenamiento del equipo de soccer.—

—Emh...— El recuerdo de lo que había pasado hace un rato llegó hasta la mente del castaño, quien dudaba en preguntar.

—Quieres saber el porqué de nuestra reacción al ver a mi hermano hace rato, ¿No?— Interrumpió el menor, quien se veía mas calmado que la última vez respecto a ese tema.

—Si tu gustas...— Dijo el chico, si bien quería conocer el secreto, eso no significa que fuere de su incumbencia.

—Es una larga historia...—