Eran las consecuencias de sus errores del pasado, pero de alguna forma debía ganarse la confianza de Lauren porque había observado lo buena chica que era, como era con su hermana y la forma tan madura de ver la vida. Lauren era alguien tan inteligente e incluso increíble que le dolía no tener una confianza con ella, quería ser su amiga pero era tan difícil sabiendo como habían sido las cosas antes, comprendía su distancia a la perfección, pero quería tener a la mujer cerca porque de alguna manera llamaba bastante su atención.

¿La razón? No lo sabía.

Caminaron hacia la cocina con una Lauren tímida sin si quiera dirigirle la mirada, estaba tan retraída, siempre era así cuando se trataba de Camila. La morena tan solo soltó un suspiro tomando los ingredientes necesarios para hacer las galletas, observando de reojo como Lauren miraba sus manos apoyadas contra el mesón sin decir ni hacer nada, tan solo estaba ahí como le pidió. Tomó la harina vertiendo en un bol para comenzar a preparar las galletas para su hermana en un silencio bastante incómodo pero no sabía cómo abarcar una conversación con Lauren, lo había intentado en los días anteriores pero no funcionaba, simplemente Lauren era como si tuviera temor de ella.

-¿Quieres amasar conmigo?.- pregunta amable la morena, Lauren la miro por un momento asintiendo sin decir nada. -Es fácil, solo debes tomar esto entre tus manos y estirarlo.- le explica mientras hacía los movimientos suaves sobre la masa, Lauren asintió parándose a su lado estando cerca por primera vez.

-Si te da asco que toque la masa...- comenzó a decir pero la morena la interrumpió.

-No debe porque darme asco.- dice segura. -Serán para Sofi.- anuncia sonriendo.

-Te recuerdo que soy el fenómeno del pueblo.- dice alzando levemente una ceja.

-Para mi no lo eres.

-Pero lo fui.- replica de inmediato. -Lo soy para tu novio, y temo que él venga hasta aquí a golpearme porque créeme que no se siente bien.- la mira por un momento sacando por primera vez lo que sentía.

-Eso no va a suceder.- le asegura. -El no tiene derecho de venir hasta aquí a golpearte, nadie lo va a permitir.- le corrobora.

-Lo hará en algún momento Camila, ¿Puedo llamarte por tu nombre?.- ocupa leve ironía en lo último.

-Puedes hacerlo... no dejare que Matthew te vuelva a golpear.- le asegura.

-No lo harás Camila, sabes bien que de alguna forma si no fuera porque tu hermana me ayudó tu jamás me hubieras ayudado, tú también hubieras deseado que muriera.- declara dejando la masa a un lado sacando la leve impotencia. -No finjas que te importo, porque ambas sabemos que no es así.- declara.

-No deberías importarme, pero aún así lo haces.- le dice sincera. -Y me arrepiento por lo que hice, por cómo actué y por la forma que te traté, porque no veía lo maravillosa que eres, y sé que es difícil para ti creer en mi pero solo te pido que me comprendas.- dice sincera.

-No puedo comprender que alguien dañe a los demás por lo que los demás dicen.- la mira a los ojos. -¿Sabes lo que es llegar a esa maldita casa llena de sangre con ganas de solo morir y un cuerpo que apenas se movía, sin tener que comer? No lo sabes, y nunca lo sabrás, porque tú provocaste más de una vez todo eso Camila, no me pidas que te entienda cuando tú no has pasado nada de lo que yo he pasado durante toda mi maldita vida.- le dice llena de impotencia, Camila la miraba con tristeza. -Y si esto te falta el respeto llama a tu maldito novio e inventa algo que jamás ha sucedido para ver si de una vez me mata.- termina de decir.

-No podría hacer eso nuevamente.- dice honesta. -Me arrepiento de lo que hice Lauren, de verdad lo hago.- suelta un suspiro.

-Si no fuera por tu hermana hubiera muerto de hipotermia en noche buena.- le dice frustrada. -Tus arrepentimientos vienen porque tu familia te ha hecho pensar de esa manera, porque sino jamás te hubieras arrepentido de lo que hiciste.- declara. -Eso es ser hipócrita.-

-Tienes razón, pero a veces deben suceder estas cosas para darnos cuenta de la realidad.- toma su mano con sutileza, pero Lauren la apartó. -Solo te pido que creas en mi.-

-No será posible, no puedo hacerlo porque estoy segura que cuando volvamos a esa Universidad todo volverá a hacer como antes.- hace una pausa.

-Prometo que no será de esa forma Lauren, todo cambiará.- la mira honesta pero Lauren negó.

-No prometas cosas que no vas a cumplir.- declara. -Para ti sigo siendo una maldición, nada va a cambiar entre tú y yo, porque nunca ha habido nada.- dice decidida dejando a Camila sin palabras.

Lauren sabía bien que las promesas nunca se cumplían, menos para alguien como ella.

No podía confiar en Camila.

*
*

Comenten.

Resistir. Where stories live. Discover now